, las sillas de madera tenían diseños, y cuando entramos el olor a café y la calidez del lugar me hicieron cerrar l

n que era mi favorita, el in

las mesas de atrás, yo asiento y lo sigo, Adrien pon

na chica pelirroja acercándose a nosotros,

a, el mejor que tenga

ted se

ismo

onas van abrigadas pero se ven tan felices, tranquil

unta Adrien sacándome de mi

s per

—. ¿Es que en tu ciudad no hay persona

no los llenan por completo, no lo sé, simplemente me parece bastante curioso, tú no ves este tipo de expresione

omo un infierno —

ento no quiero irme

en tazas pequeñas y con un corazón

o, algo sabía de Francés, así que ente

rico —dig

as aficionadas al caf

sonrisa hermosa, y un pequeño hoyuelo s

erías de París, y todos los sabores de café, en m

sorbo a

uy bonito —digo riendo, Adrien

eñorita Agatha —dic

de vacaciones, quiero di

a travesía suya, claro, si no le m

ed es de aquí y sabe muy b

r definitivamente estaba completamente deleitado con el sabor,

ahogo con el café comienzo a toser—. Disculpa, suelo ser bastante sincero a

que

o quiero ser

a —digo riendo—. Es que bueno, estaba mu

as de otro mundo —dice rie

me si

de todos los colores, todo estaba perfectamente situado, había un camino que estaba cercado por una reja de madera, co

yas cancelado todo tu t

as cosas de ti —dice r

—asumo, é

, me dijo que cuando te conociera iba

Roberta

ido con todas las cosas que ella me h

expectativas?

, no solo por el sexo, que claramente me ofrezco a segu

o sabía —digo gu

ías novio —dice miránd

co te lo

io? —pregunt

ar—. Que bueno que no la tienes, no soy e

o de muje

s que cualquier palabra, simpleme

conversar con él, era el tipo de hombre con el que podías tener sexo y conversar de cosas de la vida, estuvimos juntos

podemos vernos en la tarde, a

mero, era muy proba

e! —dice Roberta frunciendo el ceñ

cuando ya e

¿Cómo te fue con

s Adrien —digo mo

rien? —pregunta sor

jo que porque no me había quedado

s el mundo, terminar en la misma

estuvimos conversando —dig

ecer —dice ella suspira

s no son para mí, además él

aquí —dice encogi

o fácil, no se detenía a pensar en los pro y contra de las a

n sexo, hoy fueron

é ti

vitan a tomar un café es para conocer más a la

tendremos que conocernos un

ego—. Eso creí, no te engañes Agatha, estás en la ciudad del amor, a

sos, nosotros éramos socios, y no podía haber otro tipo de relación más que esa, y