esa y conocerás al amor de tu

e ambas teníamos para reírnos cuando no nos sucediese alguna situación, y esa, era por demás absurda en más de un sentido, así que

el doctor no pudiese quedarse a hacerle compañía—indicó Pr

ré pendiente de alguna emergencia, así que tú tranquilo, estaré bien sola, no creo que ven

saturada… No puedo creer que los representantes todavía no definan los nuevos puestos y

u esposa, así que lo in

ende cómo funciona esto, ve, no es la primera noche que quedo sola a

contestó el teléfono y siguió su cami

otra emergencia médica relevante que no fuese extremadamente crítica, de cuidados intensivos o fatal —ya que t

no, algo que de algún modo me llenaba y de lo que estaba muy orgullosa. S

n la vida al detectar una falla cardiaca, y así fue como me convertí en una niña más que se convirtió en una huérfana de la vida. En ese hospicio en el que crecí, conocí a la únic

ck

ando te llegue el príncipe azul, avísame para hac

ensueño. Siempre hablaba con ella sobre mis gustos, sobre las cosas que quería usar, lo que deseaba vestir. Por lo que sonreí

pero no era

de forma tal que el mundo hacía las cosas mucho más difíciles. Por eso, me sacudí los pensamie

en una de las puertas de vidrio que estaban selladas. Algo me pareció llamativo, y pensé que podía ser una persona sin hogar

ombre levantó la cabeza y me di cuenta de que estaba mal

é con preocupación para ver s

emergencia, en piloto automático, corrí a busca una de las camas que bajaban, con algo de astucia lo subí a ella, ya que era un hombre pesado, alto y bien constitu

me di cuenta enseguida que tenía un impacto de bala con orificio de salida, pero había tocado algu

cerrar de

tiese en más problemas. Revisé y con ayuda del equipo de rayos X me cercioré de que no hubiese daño óseo en alguna otr

ndo de revisar los vasos dañados, los reparé dentro de lo posible, lo que hizo que se estabilizase. Luego suministré solución Ringer para repon

viásemos los detalles hasta después de atenderlos, pero mi deber era que debía reportar al hombre de inmediato. Sin embargo, una parte de mí no quiso l

d del centro comunitario, era ayudar, no informar de cosas cuando no sabía todo el contexto. A veces, era bueno espe

como tenía tatuajes por doquier, tintas con un lenguaje que yo desconocía, pero que me sonaban al italiano. No sabía nada de lo que esos símbol

ó el horóscopo» dijo una v

e necesitaba era dormir. No era la primera vez que atendía a un hombre guapo, pero sí a u

hombre, no solo eran un caso, sino que result

así pasaron las horas hasta que dormité un rato y cuan

n fue confu

estás d

tratante, así que tenía que ser suave, tanto como podía dada la situación. Me acerqué poco a poc

ro de mí