La Mujer Olvidada del CEO

ba como una planta bien cuidada que estaba siendo regada con ternura, comprensión y una pasión descontrolada. Ella no necesitaba

llena de miserias al

podían, pero nunca se detuvo y luchó cada día por convertirse en una diseñadora de modas famosa en esta ciud

odiaba, pero dado que se encargaron de minimizarla cada que podían

evó en un odio irracional de su madre hacia Alice. Siempre la tildó de ramera, para ella la nueva novia de su hijo era una bazofia, que trataría d

e de texto, esta noche era su primer aniversario y él si

ltimos toques a su maquillaje, que aunque sencillo, quería que se v

dres, él estaba recostado del capó de su auto, con un traje casual que lo hacía ver realme

guapo mi amor.— respond

do una mano con el regalo y luego la otra con el ramo de r

majestuosos presentes.— sabes que no me gustan este tipo de co

arse con él y menos en un día como este, así que solo se dejó caer en los brazos de su amado para sentirlo cerca nueva

ume la encendía por completo y Alice solo podía pensar en que terminara la cena pa

Francesco reservó un gran espacio solo para ellos dos, siempre fue muy exagerado en estas cosa

ella estaban varias fotos de sus mejores momentos hasta ahora, Francesco siempre lo tuvo tod

ar de todos sus millones y de su excentricismo Alice pudo ve

tengo dos regalos para ti.— esto provocó una pequeña risa de los dos, cuando estaba

ara ordenar.— Francesco llamó a un joven para que los atendiera mientras m

e esa manera, el lugar era espléndido, pero ellos apenas y se quitaron la mi

lice mientras sacaba una pequeña

opa de vino a su boca.— lo que no me gustó es que dejaste toda la botella para mí, ¿Enserio no beberás un poco

ostrando sus dientes al sonreír y deslizó su segundo regalo de la noche hacía él qu

n la mesa y su semblante cambió completamente al ver lo que habí

que le quiso trasmitir dado que en la caja habían unos objetos de bebé.— seremos padres, Francesco.— Ali

empo que se levantaba de la mesa y aflojaba su corb

a y levantándose de la mesa también, ella ya no se se

os no puedo ser padre, tengo muchos asuntos que arreglar antes de eso.— Alice e

fruto de nuestro amor.— ella se acercó hasta él para tratar d

i trabajo.— esto último hizo que el pecho de Alice se apretara, ella había imaginado que está noticia alegrarí

ero ya no podemos hacer nad

taba mirando ahora.— deberás abortar Alice, definitivamente este no es el momento de tener un bebé.— Alice sintió que algo en su interior se queb

ada, hace unas horas ella jamás hubiese pensando que se podría decepcion

l lugar, necesitaba tomar aire, s

lla y le dijera que no era cierto lo que había dicho, que solo había sido una reacción equivocada por la impresión que le

sentía peor con cada segundo que pasaba, ¿Acas

algo, podía caer al suelo. Así que tomó un taxi para irse a casa, si Francesco no quería a su hijo, ya