sobre las pequeñas calles empedradas. El cielo estaba pintado con suaves tonalidades de azul

l océano se mezclaba con el perfume de las flores coloridas que salpicaban las ventanas y balcones de las casas trad

de mangas largas. Después de bañarse y cepillarse el cabello, se puso la ropa. Todavía estaba perdida en esa posada con una decoración rúst

hierro forjado, se encontró con Genevieve charlando con la empleada que recibía a

pasó l

u buen corazó

hambre! — Sonr

había abusado de la hospitalidad de esa mujer altruista. Despué

n con

s mesas charlando distraídamente cuando

acompañados de mantequilla, mermelada, miel o Nutella. Además, había café o té, jugo

área gourmet frente al mar. La mujer de rostro marcado tenía una sabiduría y educación adq

r sincera con

nuar mientras se servía un poco de té negro

nsé que mi hermano podría ayudarme —la voz le falló

ó un trago de su té caliente. Internamente, Evelyn ya

se, pero sintió el toque de la mano de Ge

— señaló el croissan

con un esposo obtuso, de la fuerza que encontró para superar las situaciones y bus

ija viv

Mu

yn tenía un sembla

sa de la taza. Genevieve miraba pensativa a la

edo creer que te permitieran cas

rtos — dijo

e — puso la taza de

s posadas que tenía en Marsella y que necesitaba a alguien para cuidar las

un lugar nuevo, donde pudiera cuidar del bebé que esperaba, era maravillosa

tularme para

posada recibe muchos turistas y siempre hay vacan

Evelyn expresó su gratitud al a

esco después de tantos días de incertidumbre y sufrimiento. Evelyn sentía una

omer — observó el vientre de Eve

▃▃▃▃

equipos, listos para otro día de arduo trabajo. El sonido de los motores rugía

nido poco tiempo para conocer el pueblo, aprovechó el paseo en automóvil para observar a los

oresco que ofrecía la aldea. Caminaban por las estrechas callejuelas

el Café-Bistrot Chez Léon, donde los turistas se reunían en mesas al aire libre. Todos charlaban animadamente mie

estaba embarazada de su nieta hace algunos años. La vida las había llevado de una manera tan abrupta, pero al