ado de recibir por parte del señor Avery Pendragon, como estaba escrito e aquel papel que le dejó el hombre con su nombre y di

nsabor extraño. Ella se había reportado enferma en el trabajo y regresó expresamente

apartamento se pusieron a charla

abeza—. Creo que estás a punto de ser es

para no hacerle una mirada mo

ansión y esa inmensa cantidad de dinero en nombre de un primo lejano que

blaba con el agente y en mi opinión, no tengo nada que perder ante el mundo. Ahora no soy nada, no tengo ni en qué caerme muerto —Danilo se en

a intención de cambiar de opinión; ni siquiera de considerar aquello como la estafa del siglo. Después

die le abrió. Él no quiso pensar en el hecho de que no abrieran porque se trataba de él, sino que, quizá habr

a Lara. Allí estaba ella, en su cómodo sofá, con las piernas cruzadas y un bowl de palomitas de maíz; se veía muy sumergida en el p

de su llegada y se dirigió a su habitación improvisada, que constaba de un par de edredones de su amiga y una almohada; su Tablet aburrida

beneficios de la vida que se merecía. Observaba el papel con el nombre del agente y abogado. Esa fortuna estaba al alcance de unos cuanto

r que todo lo que cocinaba ella sabía a gloria–, Danilo no pudo evitar sentir las ansia

día. Si te emborrachas

y el vicio. Danilo había salido de una, con la excusa de ir por chicles a la tienda, lo cual Mary ni en los más imposibles sueños le creería. No obstante, ella no era su madre, n

orque en esa ocasión lo habían sacado por pelearse con otro hombre de manera irracional

a de lo lindo con su pareja había volado hacia una de las mesas del bar; dejando en el suelo

de golpes había caído sobre Danilo, haciéndolo caer de bruces en el duro suelo, ya que los niveles del alcohol alentaban sus movimientos. Las mujeres a las

spertares. Y no solo eso… Era jodidamente tarde para su cita con el señor Avery. El día no podía comenzar de la peor manera para él, y to