spondió la llamada
marlo. Warrick sabía cuáles eran sus intenciones, p
gracias por preguntar —habló sarcástica l
ven r
se rió amargamente—. Ay por favor, no seas hi
tigo y no merecías lo que te hice —Warrick aprieta el puente de su nariz haciendo un
stá bien, acepto tus disculpas —dijo apoyándose del respaldar del taburete—. Pero hazme el favor y no vuelvas a llamarme, el hecho de que te perdone
osas para irse a la oficina. Escuchó unos pasos en el pasillo, se asomó y la vio allí. Madelaine llevaba un overol de un color
ás y nada menos que Warrick, quien la observaba con su habitual rostro in
te habías marchado —Madelaine
e tardado. Quería hablar unas co
aleras dispuesto a bajar, p
asado suficiente —pasó por su lado sin
tuviera. Mordió su lengua para no soltarle
al que él. Se lo habí
volvemos a intentar? —le propuso estirando su man
e una bofetada o tirarlo por las escaleras. Pues recordó que le juró a su hermano l
y difícil, le odiaba. Y por lo vist
que ver en todo esto, seguro te dijo que como te estás quedando aquí debemos ten
s estar encerrados en la misma habitación sin discutir o alguno de los dos acabará rodando por las escalera
Madelaine le pareció demasiado pretenciosa. Estuvo dispuesta a mantener una convivencia agr
il antisocia
vida imposible. Pensó Madelaine, dibuja
has metido, Warrick —
nta años, por lo que Warrick les recordó que no debían acercarse a Madelaine con otra intención que no fuera el trabajo. Los conocía y sabía que la joven sería
s trabajadores, que recordaba n
dó acercándo
ombres que intenten pasarse de
l adolescente sin atreverse a m
nspiraba un poco de miedo. Los rumores que se esparcían en el pueblo donde vivía sobre el hij
lo que tenía que decir—. Este año tenemos una competencia aún más dura que la anterior, es por e
ondieron todos los
no pudieron simular su asombro al ver a una chica como ella. Warrick se encaminó hacia la joven y
soltó el brazo con rapi
esclavos —murmuró Madelaine c
entario. No estaba de
a ellos para que no se
—lo interrumpió cr
con ella y de un momento a otro le interese su bienestar.
iones sentimentales dentro del trabajo. Así que espero y obedezcas —la jov
retiró sin siqu
la jovenen un