oche fría d

ndo por la fiebre y el corazón congelado por el remordimiento. Patrick, mi prometido, me había echado

orque su prima lejana, Sasha, le s

él, le di hasta el último peso que había ganado con el sudor de mi f

una

en el aire helado, solo podía pensar en una cosa: si tuvie

, abrí l

álido. No había frío, no hab

, y a mi lado, Patrick me sonreía con esa cara

está esperando. Hoy firmaremos el contrato

oque ahora me daba asco. Mi

se acercó a ella, pensando que yo no miraba, y la abr

ncipal, la más grande y soleada, será para ti. Lina pued

lce y venenosa. "Eres tan

cén. En mi vida pasada, ese fue mi cuarto

rada había muerto en esa calle fría. La que estaba aquí a

os documentos en la mano. Patrick me siguió, sonriendo,

pel por el que había sacrificado todo. Lo miré, luego miré a P

ces, lo

ro, y dejé que los pedazos cay