l aire, tan absurda y fuera de lugar

azo de Ricardo y se pavoneó frente al señor Dubois, qui

tuviera tomando el control. "Esta señora ya no tiene autoridad aquí. A partir de ahora

la de rabia pura y helada la invadía. Todo el dolor, la traición y la

la mesa de bebidas, tomó la botella de Tequila Imperio Añejo,

reaccionar, Ximena le vació la

reando por su rostro maquillado y su blusa de seda barata, dejándola como

o agudo, una mezcla de

gritó, aunque era evidente q

Con un movimiento rápido y pre

LA

de los gritos anteriores. La cabeza de Sofía se giró hacia

en un silenc

o. Se ajustó la corbata, miró a Ximena co

nión haya sido interrumpida. La llamaré a su número perso

ejando atrás el desastre. Su salida fue un veredicto

ó la puerta, R

do a socorrer a Sofía, que ahora sollozaba de forma

años, no vio al hombre que amaba. Vio a

Ella insultó a mi empleado, saboteó mi negocio y se acostó con mi

acunaba a Sofía, y lo mir

e. Hoy me doy cuenta de mi error." Hizo una pausa, su mirada descendiendo hacia la

a Ricardo más fuerte que la bofe

. no habl

interrumpió ella, su to

pareció sacarlo de su furia y traerlo

hables en serio. Fue e

vuelta y caminó hacia la puerta con la espa

El cigarrillo que tenía en la mano tembló y cayó al suelo, la p

cturado, y él acababa de descubrir, demasiad