a en SAFE

ódigo: 21

DERECHOS R

del otoño, e

los mejores restaurantes de comida mexicana, las reservaciones no han parado y desde que llegué de mi viaje hemos estado a tope. Los meseros entran y salen de la cocina llevándose platos llenos

eren conocerla en la mesa tres ― Me dice mientras

la especialidad del lugar. En verdad no me gusta mucho salir a que me conozcan los clientes, Pedro, mi socio, es el indicado p

testa el mesero y

ra?― Siempre

ento del restaurante, tienes todo el derecho de salir

cina mientras yo continúo arreglando platillos y sirvi

entras emplato un delicioso mole poblano. ―¿Q

rante a tope ― le c

s te afecten. Vamos, no

intención de ayudar ― Yo lo tomo desde a

poco y cuando salgo por la puerta de la cocina junto con Pedro, observo a todos los comensales felices comiendo

e no son de aquí o de alg

o lentes para ver de lejos, pero debido al vapor en la cocina prefiero ponérmelos hasta que salgo. Voy viendo

da! ― s

pregunta Pedr

dad sé que algo está por suceder. Llegamos a la mesa y ahí está

ió» pienso

asa Sandoval, les pres

no supiera quien soy, me escapé a las 5:00 am sin dejar ni un rastro y estuve evitando la playa todos esos día

o ― dice Pedro presentándome a todos. ―Tengo

ntesta él viéndome a los ojos fijamente― emp

ienso y me siento tan estúpida porque sonrió sin poder

haya pasado la noche conmigo meses atrás. Él sabe

toy seguro que el disfrute es su especi

aquí y si gustan puede quedarse con ustedes a discutir cualquier cos

on nosotros? ― sugiere Diego, mientras t

visar que todo esté en orden. Le indicaré al capitán que les traiga una bebida o dos a cuenta de la casa, con permiso―

me dice Roberto el

― pregunto como si tuviera

sa de inmedi

unta qué quieren beber y lo

í C

y felicitada hoy ― expreso guardando la compost

mposible volver a concentrarme, comienzo a revisar los platillos mientras en mi mente repito miles veces su no

rías a encontrar― murmuro para mí misma y desp

o muy cansada y todo lo que quiero es llegar, darme una ducha y cenar viendo Netflix, aunque debo admitir que no puedo dejar de pensar en el arge

sobrina que trabaja

í C

Diego D’angelo

es guapísimo que no, pienso investigarlo tan solo sal

lo tranquila mientras tomo mis cosas y salgo de la cocina, donde escucho a todo mi persona

a chef― dicen

― ¿es en serio? ― susurro cuando lo veo recargado sobre un auto. Sube la mano y me dice "ven" tal y como lo hizo en e

fante ― que en verdad se llama Valle Sandoval, nombre femenino que le hace alusión a la santidad

e buscaste

estoy coq

l o en ningún lado ¿me dejas en la habitación y ni siquiera me decis

además es evidente que es algo a lo

como sa

sé, in

temblando?», pienso para mis adentros

tar ahí de nuevo pero no, la tierra te comió completa,

stante intenso ―y no puedo e

an y ahora que sé que sos chef ya entiendo

za?», me quedó mirando al aire cuando siento que su mano toca mi rostr

rte a tu casa ― dice

ediato ― yo puedo ir s

pera tu novi

mayores que no quieres conoc

inferior ― ¿Entonces puedo sa

el restaurante hast

onríe y cruza los brazos a la altura de su pecho― ¿me estás dando pr

ñana, yo lo hago el domingo ― Y de pronto no tengo ni idea del porqué le di t

podes desvelarte? ―

isa ¿me crees?―respondo sin medir

No te rías, es verdad. Es cumpleaños de mi abuela así qu

rme pero nunca me había

ue tú crees. Mira, Diego, en verdad me gustaría salir contigo, pero mañana cierro y suel

ntención es diferente ― Creo que alguien me debe una d

puedes venir a esa

dice mientras se mue

pondo y sé que de nuevo mis pa

sperar a ver que preparas

ómo me observa y sé que si pudiera h

urro ― mis hermanos se

s hermanos Nombre, yo

ia. Él se sorprende. ― Seis hermanos, uno es geme

andate no quiero pensar que me harían esto

uí en San Diego, pero mañana llegan así

sigue con esa sonrisa tonta ― Ent

o más tranquila posibl

Nombre, no te

de la tentación pero, no puedo dejar de sonreír como estú