la tranquilidad que tengo a esta hora. Solo que hoy a diferencia de los demás días comunes al despertar en mi cam

ortadora del símbolo una marca que ha pasado de mujer a mujer por generaciones en mi familia. Aunque mi padre se hizo de él cuando mi madre falleció al tener los cinco años e

mí. Aunque estaba acostumbrada a ver a las personas morir por mi culpa, con él no quería que fuera así. Murió por protegerme y aún no sé qué pasó

dre siempre ha tomado las decisiones difíciles de mi vida y me ha cuidado de todos. ¿Por qué las

on las nueve de la mañana —dijo Sa

fastidio, mientras caminamos dentro del castillo en silencio. No me

da dulce, pero muy severa a la hora de dar órdenes. Mi seguridad es lo primero y en repetidas ocasiones me ha dicho que daría su vida por mí. Y es

vez que estamos en mi habitación y ella

el resto del tiempo? —pre

omentarios tan simples referentes a mi físico, todo su aspecto autoritario se cae en estos momentos donde parece no tener respue

lo hubiese hecho sin dudarlo ni un segundo —respondo, mientras me coloco el vest

adre decía que era mi culpa, pero que él arreglaría el problema. Siempre lo hacía y con él me sentía segura, Lucca era más dulce y nunca hablaba cosas de adultos c

para estar lista! —gritó mi

de vestirse a tiempo señor Eduard

dejen de demorar —co

su traje negro impecable como siempre. Las personas lo conocen y le respetan porque lo único que inspira es confianza. «Ojalá estuvier

es entender que yo puedo seguir tomando las decisiones hija —dijo mi pad

dieras hacerlo tu papá, ¡no quiero nada de est

bolo —dijo y miró a Samantha que le hizo una seña de que ya es hora—. Ahora de

tiendo

scuchado que tantas personas me adoraran. Que estén aquí solo era muestra que mi padre se encargaba bien de la situación. Al castillo no llegaba nadie extraño porque estaba protegido por el símbolo para no ser conseguido por personas ajenas a mí o a mis cuidadores. Hasta que un chico empezó a

corrí a la parte de abajo del castillo mientras Samantha detrás de mí me gritaba que me detuviera. Entre al salón que sería mío justo hoy

se está encargando —dijo c

miro y su semblante cambia—, ¿puedes explicarme eso Samantha? O ¿Puedes explicarme como mi mad

cinco años y averiguar qué está pasando —acota—, sé que te suena irreal, pero aquí no he podido saber cómo las personas mueren quizá un tiempo más adelante ya se sepa, volverás al tiempo y lugar en el que te vas. —Toma mi mano y agrega—: Respecto a tu

mpo? Si mi madre solo veía el futuro qu

s espec

uera mi deseo. Pero irme así era algo que no entendía. Ni siquiera sabía el don de mi madre hasta hoy. A lo largo de mi vida jamás

as cualidades de las que mi madre hablo?

lastimada, pero puedes hacerlo, el símbolo lo entenderá está conectado a ti —Toma mi mano derecha y la presiona de manera delicada—. Las cualidades solo me las otorgarás cuando me creas digna de

so? ¿Lucca sabía que ella mor

muy dulce— La ayuda solo si la portadora se lo permite y le cuenta. Cada emoción muy fuerte la vive un cuidador, el dolor más intenso puedes no tenerlo tú y sufrirlo tu cuidador. Ahora que te interesa todo esto podré explicarte con

udaré, cuando practiquemos será sencillo. —Sale una lágrima de mí y ella acaricia mi rostro limpiándola. Le doy la autorización que le abra a mi padre que no dejaba de llamar a la puerta. Mientras camina a abrirle. Sentí que me despedí de Samantha no quería esta responsabilidad, no

r primera vez. No sentí dolor. Llevó la gota de sangre de mi dedo al símbolo y siento