a las puertas que llevaban al aparcamiento de los alumnos. Todo parecía despejado. Tan solo había un chico al final del aparcamiento con esos pantalones anchos para nada atractivos e

de dolor en la cabeza, abrí la puer

recían tan bonitas en las fotos, flotando en el cielo, medio tapando el sol. Pero eso no importaba. Tuve que entrecerrar los ojos con dolor y mantener la mano en alto para tapar l

que no has vi

da podía ver la cabina de la camioneta, en la que Dustin y su hermano Drew hacían lo que hacían de forma habitual: pelearse y discutir sobre Dios sabe qué chorrada de chicos. Por suerte me ignoraban. Miré de nuevo a Heath y sus

do en la escue

e crío se hi

oco, ¡loco p

brí la puerta chirriante de mi Escarabajo y lancé

ndo al fútbol? —dije, manteni

han dado el día libre por la paliz

abernos estado prestando atención, lanzaron un par d

sabes, el gran examen de geometría de mañana. —Intenté sonar normal y despreocupad

é, ¿te ha dicho Kayla alguna chorrada sobre la f

biera puesto los cuernos. Como una imbécil, me olvidé (vale, temporalment

o que hici

sus excusas se apagaron para formar una poco atractiva m

omenzó a decir,

vía distraídos Dustin y Drew, que ahora cantaban a p

an abiertos de par en par c

que estás probando para la clase d

estar marcada. E

tregua con la tos. Casi me doblé por completo, intent

sde la cabina—. Vas a tener

ueses a echar un pul

! Sabes que ella no fum

tido común, pensó que estaba defendiéndome al gritar a sus amigos, que de forma instantánea sacaron

ey es un puto bi

o lento en algún lugar de mi interior desde que Kayla se apartara de mí, bullese y se d

s mierda también por tu parte. —Hice una pausa para mirar de Dr

tiempo me produjo una extraña excitación: Dustin parecía asustado. Asustado de verdad. Volví a mirar a Drew. También p

Sentí

h interrumpió mi concentración e hizo

r. La camioneta dio una sacudida hacia delante, haciendo que Heath perdiese el equilibrio y se

mente, cor

o sobre manos y rodillas y me agac

abía algo que olía maravillos

s como un gran cazainsectos manipulado genéticamente? No me di cuenta de lo cerca que estaba de él hasta que

aberlo hecho. Lo hubiera hech

emente, con voz

corazón me latía con tanta fuerza que podía

ngre que cubría la palma de su mano—. Ah, mierda. Supongo que me he… —Su voz se apagó cuando me miró a la cara. Solo podía imaginar el aspecto que tendría, con l

hablar en voz alta de la sobrecogedora oleada de deseo candente que intentaba ahogarme. Y no era porque Heath estuviese tan cerca. Ya había estado

otros. Drew bajó de un salto, rodeó a Heath por la cintura y ti

¡Estoy habla

veterano del equipo de BrokenArrow, y realmente enorme. Dusti

mientras Dustin pisaba a fondo el acelera

con tanta fuerza que tuve que intentarlo tres v

ra vez entre toses desgarradoras mientras conducía. No quería pensar en