no estaba de acuerdo, en especial su papá, “No es un futuro para mi hijo”, había dicho el señor Leprince cuando Milus le había llorado y suplicado para q

su padre, así que después de aquella discusión a

drás mantenerte tú solo

ás equivocado, padre

ento por unos días mientras encontraba trabajo. Milus sabía que obtener un empleo sin estudios era difícil, pero

iódico —dijo, mientras se sentaba en la

sas sa

. Haré todo por mi cuenta —dijo con decisión. Volvió a ojear la sección de empleo, había algunos remarcados de rojo—. Hay un trabajo en el mercado movien

quedarte el tiem

para pagar un departamento. Después buscaré la manera de ent

animándote. Estoy orgullo

aron estaba ahí para hacer una denuncia contra un hombre que había intentado robar en la pastelería de su mamá; Milus, e

ental? —le preguntó Aaron, luego de

o en los ríos y nadie les dice nada —dio un suspiro—. Esta ciud

da, hay ciudades incluso más contaminadas que la nuestra. Por desgracia no es una pri

en imponerme la suya por el bien de…, nuestra familia es t

de la naturale

uena en eso. Yo quie

vida en algo que no disfrutaba. Fue después de ese tiempo que decidió cambiar las cosas. S

*

andonado su casa, su padre estaba enojado con él, pero estaba seguro de que lo buscaría en un par de semanas luego de que se le pasara el enojo, y si mantenía el celular consigo entonces lo encontrar

a de la oficina cerrada frente a sus narices ¿Por qué era tan complicado?—. A e

oy y se animó a sí mismo. Limpieza en un departamen

taba eq

el hombre una vez que llegó a la dirección que marcaba

muy bueno en la limpieza, he limpiado los invernaderos de mi fam

ta ¡Le habían cerrado en las narices otra vez! Hiz

h —preguntó a la nada, imaginando que t

iguientes fueran exactamente lo mismo. Si fallaba tendría que regresar a casa arrastrándose como un gusano y pidiendo perdón, pero en el fondo creía que había hecho lo correcto, luchar por

e había terminado un round bastante acalorado donde había perdido. Las discusiones de pareja era algo a lo que no estaba acostumb

lpear con la pared de enfrente. Por otro lado, tenía más experiencia en las p

carácter estaba en duda, lo miró en el momento que se p

sillos de su pantalón y se dio la media vuelta para huir directo al asc

igo del s

hí, así que entendió

ece en su departamento —respondió volviéndose para

sonrió a su propio come

ascensor— ¿Vas a tu trabajo? No

na farmacia, me he graduado de la universidad de medicina —dijo con ci

E

lo haló

n simple chico de campo que no conocía del todo la vida ni las personas de la ciudad, pese a que había estado viviendo en Brimingtown por tres años. Su amigo no contaba en ese asunto, Aaron era Aaron, amigable, cariñ

gunos minutos en los que los dos no habían hecho

dijiste que estabas en la puerta de Jung pidiendo empleo, lo

le había hecho aquella extraña invitación de

uien que limpie

—el chico se sintió mal por ello, él se quejaba de la vida que tenía, pero había personas con problemas peores—. Me ofrecen un trabajo en una comunidad no muy lejos de aquí, pero está fuera de Briming

ue has hecho, no me imagino lo difícil que ha sido

rmano sufrió un accidente, pronto se cumplirán tres años. Perdió la vista y al mismo tiempo la vida que lle

decisión —le daba

mplirlos también—. Me temo que no puedo convencerlo, y yo no quiero dejarlo, pero no hay otra mane

a que podía comprender los sentimientos de los demás, y de alguna manera,

propia comida, se aventaría del balcón en la primera oportunidad. Se ha lastimado antes, es listo, aprovecha que estoy en el trabajo, también lo intentó cuando aún iba a

o había visto y ya sentía que conocía parte del dolor que lle

Marcus, ver que coma bien, que mantenga la casa limpia para evitar que sufra una caída, cuidarlo si enferm

sté con él? ¿Es

rabajo, vivirás en n

estar desesperada, porque después de todo no era cualquier cosa, era abrirle las puertas de su departamento a

o está de acu

caré yo misma si decides aceptar

es, también vería si había un tal Milus Leprince rentando algún apartamento en la ciudad; no encontraría rast

ro antes quisiera conocer a t

la joven se vo

cena, te lo presentaré. Él es un gran hermano,

espués de haberle dado una respuesta. Milus ha

rde es

pues el joven había murmurad

aré en tu

emos esperando. —Ambos se levantaron,

jo. Milus en cambio caminó a paso lento hacia el pequeño departamento de Aaron,