LA MUÑECA DE LA MAFIA 1

o enojada a un hombre que es la mano derec

a alarmante a la expec

tás bien? ¿Te hicieron algo?—me pregunta y mira a Brayiam y yo n

e— lo siento— susurro y mis ojos se cristalizan. El asiente. — ¿Mi padre?— pr

ofundo. Me giro a verlo. Me acerco lentamente— No Michel —pone una m

o, lo veo en su mirada. Me mira fijamente a los ojos y a

ento un ardor terri

se pone delante de mí y mi padre lo mir

ante de mi padre, lo miró esperando que se apiade de mi —papito —susurro y me mira con asco

—Dice con decepción, veo sus ojos y se ven llorosos —me traicionaste —dice co

esde abajo y no me mira —te lo juro que no sabía.

que lo disfruta. Bratt

ra —por esa mierda. —Veo odio en sus palabra

DEA jamás me hubiese metido con el si lo hubiese sabido...créeme

en su mirada decepción — ¡Que decepción! —niego y no soporto es

lo que me pidas. —Mi familia es lo que yo más amo, papá hago lo que me pidas. —Lo agarro y se sacude de mi —papi con tal de

uy fuerte —estábamos preocupados por ti —me habla con amor

a me abraza fuerte y

nocente y lo hiciste por amor — dice llorand

que te perdone? —Asiento — ¿Quieres remediar el daño qu

de nadie, dice mi madre —mira a Brayiam, lo mira

adre, mi madre nunca antes se h

mi hermano enojado y supl

e Brayiam Grosbfiab ¿

te vas de aquí —lo miró s

o ¿No hay una forma de que no me vaya? — Niega —me mi

haces esa estupidez. —Mi madre lo empuja —vamos

e y niego — ¿Quieres mi perdón? reivindícate conmigo —e

terrogo, me mira serio y mir

que tuvo para no hacerte daño y ayudarte y ayudarnos a solucionar todo este lío en el que nos met

emigo —susur

e a ti. Tuve que aliarme con él por ti.-—D

iro con tristeza. —Me intercambias, ¿Qué am

sí? —Mi hermano me mira

ede olvidar que eres mi hijo también —yo lo miro

… —hago una pausa y lo miro seria —si no te importo, si me mandas con un loco desquiciado, con un matón con tal de tener más dinero del que tienes, está

o —muñeca, mi amor no lo hagas —me acerco

n. Cuida a mamá. —Susurro en su oído —Te amo —me ab

i padre, lo miró a los ojos fría

vidar... —digo firme —hoy estoy pagando un error... lamento haberte ocasionado problemas. —Me mira y yo miro mi c

n intimidante, me sonríe de lado, l

y mi padre sólo lo mira a él, no a mí, tenía la e

ira a los ojos —si le haces daño… —se miran

na vez más a mi familia, y

fiab me abre la puerta del auto, entro y

ó sería, veo que me mira y ve mi mejilla que me está matando d

ual —digo molesta, ya me harte

iar mi mejilla y me alejo. Me toma fuerte del brazo —deja de ser malcriada. ¡Me sacan de quicio tus modales! —dice serio. Y se acerca más