er desnuda recostada en la cama. Las sábanas de satén rojo mostraban su hermoso y exuberante cuer
su rostro, Charlie la reconoció y no pudo evitar soltar una carcajada. Se trataba de Lina Graham, una provocativa empleada de su
. Y aunque sus acciones alimentaban su ego masculino, él no tenía la intención de meterse con Lina. No era ningún tonto y sabía que la mujer sólo lo buscaba por su riqueza, si se involucraba con ella, seguro ten
ellas. Entre tanto, Lina se retorcía en la cama con la piel ardiendo de deseo, no entendía por qué Charlie no se abalanzaba contra ella y la tomaba. Este último anali
lanzó encima de Lina y mordió sus carnosos labios. Sus manos acariciaban cada rincón de su piel ha
harlie encima de su cuerpo. Antes de que pudiera hablar, Charlie se excitó más al
gritó cuando el hombre
ientras veía las lágrimas escurrir por sus mejillas: "Eres
a enormemente era pensar que había sido con Charlie. Con sólo imaginarse como la futura dueña de
pronto el dolor de Lina se convirtió en lujuria, por lo qu
placer, su evidente deseo por él aumentó su orgullo y entonces la trató c
chó un ligero vistazo a la mujer que tenía al lado, se vistió y salió de la habitación. Como solamente lo había ay
pensamientos: '¿Terminar? ¡Ella es una empleada común y corriente! ¿Quién diablos se cree que es?'. Ashley se había acosta
onsigo mismo, Charlie decidió