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do Ol

en el campo, así que me pidieron que fuera a algunas misiones. Siempre me he ofrecido, pero Javier dice que me prefiere en el campamento base para dirigir los méd

l. Casi vuelvo para ayudarlo, pero como dijiste, estaba bajo el cuidado

, a pesar de que estamos haciendo todo lo posible para evitarla. Los médico

ar muchas veces, pero todavía hay muchos recuerdos dolorosos para mí. He pensad

y dile que estoy pensando en él y también estoy pensando en

os. Escribiré más

mor,

n a casa, te extraño, ha pasado mucho tiempo. Cada carta de respuesta sería igual a partir de entonces también. No había razón para que volvi

a hizo hacer el largo viaje a casa, fue la primera vez en tanto tiempo que volvió a experimentar una em

y un factor necesario para prevenir la muerte entre las élites especial

loso en la forma en que podía lanzarse al trabajo y renunciar a una vida fuera de eso. Nadie llamó a su puerta a menos que hubiera una emergencia y nadie la invitó a cenar ni le pidió prestada una taza

ta fachada para alguien que no les gustaba, no tuvieron que contener la ira para evitar una e

crudo y

e afuera de la gran tienda médica, sacándola de su

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idad. Los nombres de las personas con las que tenía una conexión parecían tener dos dígitos ahora, y las yemas

rarse con un perro leal que es pateado por su amo para regresar una y otra vez al dolor y la tortura de una mano pesada. ¿Por qué se dejaba cuidar cont

o más fácil perma

todo en el color de la pizarra y el acero. Cuando el chorro frío cayó en una cortina a través del cl

algo más que el dolor hueco en el pecho ahora, pero la sensación de la lluvia ayudó. En ese momento com

lgado. Se sentía frío, casi helado, pero se obligó a seguir p

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ntraba en la gran carpa de enfermería al borde del campament

del hospital. Su cabello estaba atado cuidadosamente en una trenza que le colgaba por

hora. Algunos de sus órganos están muy heridos y si realmente vive, tendrá una recuperación larga y doloros

e en la cama del hospital. Sus grandes botas golpearon el improvisado piso de madera y dejaron marcas

uerra iba a ser el infierno en la tierra si ocurriera y verlo perder la fe en la paz empujó su esperanza hacia abajo. La picazón de

tro. Fue un período más oscuro para las negociaciones y el contacto entre paises, fue como un océano con mareas y ol

lamento perderlo. Haz tu mejor esfuerzo— le sonrió un poco a Rachel, tanto como se suponía q

al, reservaba solo una sonrisa consoladora para los hombres herido

e si su condición cambia— dijo finalmente y

aba la lona y la abría. Observó a Javier trotar un poco, salpicando el barro del suelo empapa

empre había disfrutado. Fue limpiad

las nubes opacas y ondulantes la

le relajaba los oídos...

, ¿verdad?" Se recordó

shb

que saliera a caminar con ella bajo la ligera lluvia del pueblo. Él se rió de ella

un toque de risa, apoyándos

Samael recorrían su frente mojado mientras su camisa negr

udó con el dedo. No pudo resistirse a esa mirada, ¿verdad? Sus besos sabían a lluvia esa noche, y su cuerpo r

el fl

r el área, caminando rápidamente e intentando escapar del diluvio. Su dedo se

ara hacia el cielo y dejó que las g