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cho de que él se haya tenido que alejar de todos. La reacción de mi padre fue sin duda alguna muy exagerada. Yo fui testigo de todo lo que tuvimos que pasar cuando perdió la casa, como incluso ter

tar aquí aislados de la realidad… «si yo fuese una mujer normal, si no tuviera un embarazo de

ntras que cierra la puerta det

o tratando de simular una sonris

egar a mi lado acaricia mis mejillas —Te ves triste, ¿acaso paso

está bie

o dulcemente —¿Esperas que te crea?— Inquiere y su m

tanto— Me quejo mientras de que me abraz

dos y para transitarlo juntos debemos tener confian

emasiada paciencia me tienes— Comento sincera y él se acomoda a mi lad

e todo lo que nos pasa es difícil, pero quiero que sea m

lo que me pasa por dentro no es fácil —Tengo miedo

imes… y si lo haces, lo hablar

nte y cuando siento que lo he hecho, finalmente abro mi boca

? ¿De qué?

que alejar de tu familia… de que tengas que

orque necesitamos cuidarnos y cuidar a esos bebés. Para mí es un placer es

o a mi papá. Él no debió enojarse contigo, mucho menos pe

rabia. Prometí que iba a investigar lo que paso, tratar de comprender la situación, pero por ahora no he podido. Algún día conseguiré llegar al fondo de todo y po

tas aquí lejos de tu fa

s son mi familia, e

Me quejo entre so

o es lo que teníamos en mente desde el principio, pero entiende que es nuestra responsabilidad como padres de esos bebes cuidarlos de

rte más de ti a cada

me más?— Me pregunt

e encanta, es solo que no sabía que se

finitivamente es él quien me da fuerzas para seguir adelante a