/0/3409/coverbig.jpg?v=08fe5cb9a57f664a1b24391cba27f72f)
Medicamentos, Visitas al médico, dolor y la incertidumbre de no saber si vas a despertar cuando te vas a dormir, esa era la vida de Ángelo Fiore, quien a sus 23 años fue diagnosticado con una enfermedad cardiaca lucha para que su familia y amigos tengan más tiempo con él. Ángelo luchaba por su vida solo para su familia y amigos, pero todo cambio cuando conoció a un apuesto residente que trabajaría en su caso, un residente que se volvería en su nueva razón de vida. Ángelo quería tiempo con él, quería conocerlo y amarlo tanto como se merezca, pero si de algo estaba seguro Ángelo es que se residente era la cura para su dolor. "— Yo hare todo para que te cures, lo juro— Aquel residente tomo su mano. Ángelo lo miro con lagrimas en los ojos— Mientras sostenga tu mano todo estará bien" ✾Autora: Hilary Delgado "Azapp25". Una novela llena de drama, llanto, pero sobre todo amor, "La cura eres Tú" nos enseña que el amor puede llegar cuando menos lo esperamos y la importancia de apreciar a nuestros seres queridos. Espero que mi novela sea de su agrado. Autor de la portada✾ Carlos Menéndez. Libro dedicado a: "Mis padres, mi hermano, mi tía María, mis hermanas Yara y Shaida, mis abuelas y abuelos paternos que desde el cielo me cuidan, y a mis lectoras fanáticas de MewGulf.
Pov Ángelo
Desde niños nos enseñan el ciclo de la vida. Nacen, crecen, se reproducen y mueren. Es claro que muchas veces no todos los seremos vivos cumplen ese ciclo.
Imagina que un día estas en el mejor momento de tu vida, tienes a tu familia con vida y salud, tienes el trabajo que siempre soñaste y amas lo que haces, lo tienes todo y sientes que has triunfado en tu vida, pero por un minuto, por solo un minuto, todo cambia.
Eso me paso a mí, cuando tenía 23 años me detectaron una falla cardiaca. Para ser más ser específicos, una cardiopatía viral. Fue un golpe muy duro para mi, me enferme cuando estaba en toda la sima de mi carrera, pero desgraciadamente, debido a esta enfermedad tuve que parar.
Desde entonces en mi vida, hay medicamentos, visitas al médico, fingir que no veo a mi madre llorar, afrontar que muy pronto voy a morir, pero aun así debo seguir luchando.
Luchar, es una palabra simple, pero con un gran significado.
Cuando te enfermas o tu vida cuelga de un hielo, la palabra luchar siempre es mencionada por tus familiares.
Al principio luchas por tu vida, quieres seguir adelante porque quieres seguir con vida, pero cuando te das cuenta de que el dolor es insoportable dejas de luchar por ti, al pasar el tiempo solo luchas por tu familia, porque sabes que los vas a lastimar si mueres, así que solo te queda luchar para seguir más tiempo con ellos o, mejor dicho, para que ellos tengan más tiempo contigo
.
Abro mis ojos nuevamente y vio alrededor que estaba en mi habitación, mire a un lado de mi cama y encontré el soporte para sueros que tenía, mire la bolsa y aun estaba con la mitad, aun lado del soporte estaba mi mesa de noche, que tenía algunas fotografías y una lampara.
Mi viste fue hacia al frente y vi que estaba la cama de mi pequeño chopper, mi perro.
La puerta fue abierta y me tomo por sorpresa, por lo que rápidamente mire quien había sido el responsable.
La sonrisa de mi madre apareció. — Veo que estás despierto— Ella se acercó a mi cama y se sentó a un lado de esta— Buon giorno cara.
— Hola mamá—ella se acercó a mi cara y beso mi frente—¿Cómo estás? — Pregunte con una sonrisa.
— Estoy bien— Se separo de mi— ¿Cómo te sientes? — Pregunto un poco melancólica.
— Bueno es otro día en el que despierto con vida, así que estoy bien— Sonreí.
Mi madre sonrió y acaricio mi mejilla— Me alegra saber que Dios me ha dado otro día con mi querido hijo, por cierto, debería llevarte al hospital para que te revisen.
— Estoy bien, no hace falta eso— tome sus manos y las bese— Estoy tomando mis medicamentos y descansando tal y como me dijeron los doctores— Sonreí para tratar de calmarla.
— Lo sé y eso es porque te tengo bien vigilado, si fuera por ti no estarías aquí— Sonrió divertida.
— Oh vamos mamá, no me puedes culpar— Dije con un puchero.
— No lo hago, pero creo que es lo mejor, ya sabes, no está demás que te revisen, además es solo un chequeo.
— Mamá, por favor, sabes que odio estar en el hospital.
— Lo sé cariño— Dijo mientras acariciaba mis brazos.
— Estoy bien— Sonreí— Por cierto ¿Saldrás de viaje? — Pregunte con curiosidad.
— Desgraciadamente sí cariño — Dijo algo afligida.
Desde que me enferme mi madre había desarrollado una gran dependencia hacia a mi y eso me asustaba, porque bueno, nadie puede garantizar que yo salga de eso y no quiero que ella sufra si yo no lo logro.
— Tengo que ir a Paris, pero volveré en dos semanas, estaré llamándote y tendrás enfermera 24/7, así que no estas descuidado.
— Mamá yo estoy bien, no soy un niño, puedo cuidarme— Sonreí— No te preocupes por mí, solo ten cuidado, prometo tratar de estar vivo.
— Más te vale—ella miro a un lado de mi cama y tomo el cuadro que estaba en la mesa de noche— Es una hermosa, foto, no me canso de mirarla— Sonrió— Lo extraño mucho.
— Mamá— La llame con un tono cansado.
Mi madre rio un poco— Lo siento, pero es que aún no lo supero, solo mira la foto— Me mostro la foto.
La foto era de mi ex novio y yo, ambos estábamos sentados en el césped y abrazados.
— Andy, ay cariño, enserio es que la verdad, no hay mejor chico para ti que Andy— Dijo volviendo a mirar la Foto.
Andy Harris, ese era el nombre de mi ex novio, Andy es ese chico que muchos quieren tener como pareja. Buen cuerpo, Bonita cara, bonitos sentimientos. Fue mi pareja por 3 años y la verdad nuestra relación era muy buena, pero terminamos el año que me detectaron la enfermedad cardíaca.
— Mamá lo de Andy fue... — Intente hablar, pero me interrumpió.
— Ya lo sé, ambos se separaron porque él se fue a suerte en Londres, a probar suerte en su carrera de actor y tu no querías atarlo a ti— Dijo mientras devolvía el cuadro.
— Exacto, la verdad sería bueno que te llevaras esa foto.
— Pero cariño, es una linda foto, además tal vez ustedes puedan volver.
— Mamá por favor, estar con alguien que está más muerto que vivo no es justo para nadie— Dije un poco irritado.
— Ángelo deja de hablar así— Dijo molesta— tú vas a mejorarte, ya lo veras, así que no debes estar hablando así.
Yo suspire cansado. —Madre ya hablamos de esto, han sido 4 años de sufrimiento para mí, todo puede pasar y me da miedo, pero no por mí, me da miedo porque sé que te voy a lastimar, así que debes estar lista para lo que sea
Mi madre se levantó y arreglo su vestido. — No y te prohíbo que sigas con ese tema, no digas eso, tú te vas a quedar muchos más años conmigo
La verdad no quería discutir con ella, sabía como se sentía, después de todo perdimos a mi padre cuando yo tenía 10 años y también fue por una cardiopatía viral.
Dispuesto a no seguir no ese tema suspire. — Ven por favor— Estire mi mano y ella la tomo— Gracias mamá, por amarme y estar conmigo siempre
— Eres mi hijo, mi único hijo, eres mi bebé— ella se acercó a mi frente y me dio un beso— debo irme, si pasa algo vendré enseguida
— Esta bien mamá, cuídate mucho por favor, te estaré esperando.
— Contare las horas para verte mi niño hermoso, te amo— Ella se separó de mi y sonrió.
— Yo igual te amo— Respondí.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
La puerta de mi habitación fue abierta por una de las sirvientas, ya me había duchado con ayuda claro, y me encontraba en mi cama leyendo un libro.
— Señor Ángelo, sus amigos están abajo.
— Por favor, déjelos pasar y gracias por avisar— Agradecí.
La empleada asintió y salió de la habitación.
Deje mi libro a un lado y bastaron solo segundos para que la puerta fuera abierta de golpe y chopper comenzara a ladrar.
— Ha llegado el amor más grande de toda tu vida.
Quien había dicho eso, era nada más que Dylan, mi primo hermano, quien era alguien importante en mi vida.
— Cállate, tu horrible voz le podría provocar un infarto— Dijo un frustrado quien acompañaba a Dylan.
Miré detrás de mi primo y encontré a Will, quien era un amigo y colega de la industria del entretenimiento.
— Cierra boca marica— Dylan contesto.
— También eres marica— Le contesto.
— Sí, pero yo soy un marica lindo y tú uno muy feo.
Will estuvo por contestar y solo suspiro. — Olvídalo, no peleare con un animal en peligro de extensión.
— ¡JA! — Se cruzo de brazos mientras que su pecho se llenaba de aire— Yo siempre gano.
Will dio una carcajada y se adentro en mi habitación.
— Hola cariño— Will se acercó hasta mi y me dio beso en la mejilla— Te ves hermoso cariño.
— No me mientas— Dije sonriendo.
— No lo hago, aun con esas ojeras te ves hermoso— Will se sentó en el sillón delante de mi cama— ¿Cómo has estado cariño? ¿Te has sentido bien? — Pregunto mientras se cruzaba de piernas.
— Bueno ya sabes, llevando esta situación como se puede— Respondí.
— Em Hello, sigo aquí ¡No me ignoren! — Grito Dylan muy indignado mientras se quitaba las gafas de sol.
— No lo hacemos, ven aquí bebé— Dylan corrió a mí y se subió a la ama conmigo.
Desde niño Dylan ha sido muy apegado a mí así que sus actitudes inmaduras no me afectan en nada.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
— Y eso fue lo que paso, fue muy estúpido— Dijo Will mientras abría una lata de refresco y la bebía.
— Bueno Will, al menos haces lo amas y bueno al parece se estan divirtiendo— Dijo sonriendo.
— Nos haces falta— Dylan se levantó a tomar otra bolsa de papas y se sentó en mi cama— mucha falta.
— Lo siento— Dije mientras tocaba su cabello.
— No te preocupes por eso Ángelo— Sonrió Will— Cuando estés mejor podemos irnos de viaje, escuche que las playas de México son las mejores—Will se levantó del sofá y se miró al espejo—Ganaras esta batalla cariño, es solo un bache.
— El gordo tiene razón, es solo un bache— Dylan dijo y Will lo miro molesto.
— Yo no estoy gordo, no como tantas porquerías como tú, estúpido.
— Basta— Dije tratando de parar la pelea.
— Ange, quiero ir a Ecuador, quiero conocer la mitad del mundo, así que apresúrate a curarte para que vayamos— Dijo Dylan mientras me miraba emocionado.
— ¿Qué no conociste ya la mitad del mundo en China? — Dijo Will mientras se cruzaba de brazos.
— Sí, pero quiero ir a la otra mitad del mundo, además Ecuador es el país de los tres mundos, todos deberían ir, es un país muy rico en cultura, flora y fauna, es un país hermoso— Dijo Dylan mientras se levantaba de la cama.
— Pueden ir sin mi— Dije.
— sin ti no iremos Ángelo, eso tenlo claro— Dylan me miro irritado.
— Coincido con el imbécil— Will se volvió a sentar— por cierto, Ángelo, ¿Cuándo regresa Nathan? Digo, debió llegar hace unos días.
— Me llamo hace unos días, dijo que las grabaciones de su película se han atrasado por el clima que de Taiwán— Dije mientras me acomodaba en la cama.
— Por cierto, querido primo ¿Has hablado con Andy? — Pregunto Dylan.
— Parece que Andy está el día de hoy en toda conversación— Dije algo irritado— Respondiendo a tu pregunta Dylan, no, estaba ocupado además tenemos mucho que no hablamos.
— Bien, bien, era solo una preguntar— Dijo mientras hacia un puchero— pareces un robot con esas máquinas
— Bueno Dylan, me encantaría deshacerme de ellas, pero no puedo— Dije sonriendo.
— Esta industria no es tan divertida sin ti, así que recupérate rápido cariño— Dijo Will sonriendo.
— Coincido con la pasiva— Dylan dio una carcajada.
— Dylan, tú tienes más cara de pasiva que yo, así que cállate la boca imbécil— Respondió Will.
— Claro que no— Dijo molesto.
— Mírate a un espejo estúpido, claro que sí— Will respondió con una sonrisa.
Mientras esos dos comenzaron a pelear comencé a sentir que el aire no llegaba a mis pulmones, al parecer era una crisis.
— ¿Cariño? — Will me miro— No puede ser.
— Maldición— Dylan dijo asustado— su ritmo cardíaco está aumentando, parece que no puede respirar—Él corrió a la máscara de oxígeno y me la dio— Tranquilo, tranquilo Ángelo todo va a estar bien— Dijo desesperado.
— Iré por ayuda— Will salió corriendo y comencé a ver a Dylan borroso. Este estaba marcándole a alguien.
— Tranquilo, todo va a estar bien— Dijo mientras sostenía la máscara de oxígeno.
Luego de esas palabras mis parpados comenzaron a pesar y perdí el conocimiento.
Luego de eso sentí mis párpados pesar demasiado, así que los cerré.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Pov Will.
— Aguanta cariño— Dije mientras sostenía la mano de Ángelo— Ya estamos llegando.
Bastaron unos 2 minutos para llegar al hospital de la familia de Ángelo, Dylan y yo bajamos rápidamente y los paramédicos bajaron a Ángelo.
— ¡Necesito ayuda aquí, ahora! — Grite.
Apenas entramos a emergencias, unos doctores nos ayudaron, lo pusieron en una cama y un paramédico habló.
— Joven de 27 años, presión 70 sobre 80, problemas para respirar, está inconsciente— Dijo a uno de los doctores.
Una enfermera nos aparto para que los médicos comenzaran a trabajar.
— ¿Algún antecedente problemas cardiacos? — Pregunto uno de los médicos.
— Sí, sufre de cardiopatía viral— Dije rápidamente.
— ¿Desde hace cuándo? — Pregunto nuevamente el doctor.
— Desde hace cuatro años— Respondió y vi a Dylan, este se veía más que asustado y la verdad lo entendía, no queríamos que absolutamente nada le pasara a Ángelo.
— Es una crisis, tranquilos, vamos a tratarlo— Dijo un interno.
— Llamen a la doctora Samantha Coleman, ella es su doctora — Dylan dijo rápidamente.
— Ya escucharon, llamen a la doctora— Ordeno uno de los doctores— Nombre del paciente por favor.
— Ángelo Fiore— Respondió Dylan.
El medico nos miro como si tuviéramos tres ojos. — ¿Dijo Fiore?
— Sí, su apellido es Fiore— Respondí desesperado.
— No puede ser, entonces él…— Una interna se detuvo al hablar.
Yo ya estaba estresado, el estrés y el miedo no son una buena combinación, sobre todo para alguien como Dylan. Lo mire pude ver que sus manos estaban hechas puño.
Oh no, Dylan modo diva se activó.
— ¡¿QUÉ CLASE DE DOCTORES SON?! ¡APURENSE! ¡O LES JURO QUE HARÉ QUE DESPIDAN A TODO EL MALDITO MUNDO!, ¡SI ALGO LE PASA JURO QUE LO PAGARAN MUY CARO, DESTRUIRE SUS CARRERAS! —
Grito más que molesto.
— Señor debe calmarse— Dijo un médico.
— ¡ESTOY CALMADO! —Dylan grito, la mirada de Dylan se posó en alguien que estaba en la estación de enfermeras, este miro a un médico y se acercó.
— No, no, no, no, Dylan, espera — Dije tratando de detenerlo, peor fue en vano.
— ¡Tú! — Grito.
El joven doctor se volteó y lo miró serio— ¿Sí señor? ¿En qué le puedo ayudar?
— Tráeme al encargado de este hospital, peor ya— Dijo modesto mientras chasqueaba los dedos— ¡Ahora! ¡exijo ver al director del hospital, Ahora!
— Dylan por favor— Dije desesperado.
— ¡QUE ALGUIEN ME TRAIGA AL MALDITO ENCARGADO DE ESTE HOSPITAL O LES JURO QUE HARE TODOS PIERDAN SUS MALDITOS EMPLEOS! — Grito con todas sus fuerzas.
Dylan modo diva y enojado no era una buena combinación.
— llamen a la doctora Samantha Coleman, por favor—mire a uno de los doctores y asintió.
— ¿Qué diablos está pasando aquí? Jovencito deja de hacer escándalo en mi sala de emergencias— Yo voltee a ver a la persona que hablo y era la doctora Coleman.
— Doctora Coleman— La llame.
Ella al vernos corrió a la camilla donde estaba Ángelo.
— No puede ser, ¿Qué pasó? — Dijo preocupada.
— Doctora Coleman— La llamo el doctor encargado.
— Llévenlo a una habitación en la sala VIP, ¡AHORA! — ordeno. Esto se llenará de reporteros
Ellos se llevaron a Ángelo y abrace a Dylan separándolo del médico.
— Lo siento mucho— Me disculpe con aquel joven médico.
Mire a Dylan y este al parecer al ver a la doctora Coleman, se calmó.
— Will— Dylan me miro asustado.
— Estará bien, vamos— Ambos seguimos a la doctora Coleman que nos llamó.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Luego de unas horas Dylan y yo nos encontramos afuera de terapia intensiva, Dylan estaba muy mal con esta crisis de Ángelo y la verdad yo también, ver tantos doctores y enfermeras correr a la habitación de mi amigo era algo aterrador.
— Debemos decirle a Nathan— Dylan me miro.
— Envíale un mensaje, las cosas no se ven bien— Dije.
— ¿Crees que deberíamos llamar a mi tía? — Pregunto Dylan asustado.
— Yo creo que debemos esperar que la doctora Coleman nos dé el informe de cómo está Ángelo, no la alarmemos— Dije mientras tocaba su hombro y este asentía levemente.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Pov Owen
Cansado, si me piden describir la vida de un medico es sin duda cansado, cuando decides que vas a ser medico la palabra dormir ya no era muy común en tu vida. De camino al hospital pude ver como la entrada estaba repletas de gente y varios reporteros, por lo que me preocupé rápidamente.
Con ayuda de los guardias pude entrar, corrí al piso de cardiología y vi a uno de mis amigos en la estación de enfermeras llenando algún informe.
— Buenas tardes— Salude.
— Oh hola Owen, que gusto verte— Saludo Fernando Mi querido amigo.
— ¿Saben por qué tanto alboroto? Acabo de entrar y había muchos reporteros y gente afuera— Dije mientras miraba a mis amigos con duda, rápidamente Fernando me respondió
— Un famoso está aquí.
— ¿Tanto escándalo por eso? No puedo ser, será un dolor de cabeza para a quien le toque ese caso— Sam me miro y río — ¿Y tú qué? — Dije.
— Bueno de hecho creo que es trabajo para ti— Dijo riendo.
— ¿Por qué? — Pregunte.
— Él no es solo un famoso, es el hijo de la dueña de este hospital y supongo que a ti te toca cuidarlo— Peter me paso una tableta del hospital
— Eso no me dice nada, no soy niñera— Dije.
— Él tiene una cardiopatía viral, ha estado muchas veces aquí y en distintos hospitales del extranjero, es una persona se lleva bien con todo el personal de hospital— Max sonrió.
— No puede ser, dime que la doctora Coleman no es su doctora— Dije.
— Efectivamente amigo— Dijo Sam riendo.
— Cállate estúpido— Dije molesto— Max— Este me miro—¿Lo conoces?
Max asintió. — Sí, nos conocemos desde hace año, yo era interno cuando vino lo diagnosticaron.
— ¿Oíste como uno de sus amigos comenzó a gritar a todo el mundo y amenazar con dejarnos sin trabajo?
— Dijo Fernando— Es un imbécil.
— Vaya deben ser los otros dos famosos que siempre están con él— Respondió Sam.
— ¿Cómo lo sabes? — Peter pregunto a su novio.
— Existe Instagram cariño— Dijo sonriente.
—¿No se supone que ustedes deberían estar trabajando en vez de hablar? — La voz del doctor Alex nos hizo girar a todos para verla.
El doctor Alex era el jefe de cirugía y futuro esposo de la doctora Coleman. Mi mentora.
— Jefe, no lo oímos llegar— Max hablo rápidamente.
Este se puso más serio de lo normal— Vayan a trabajar, no estén hablando en los pasillos— todos asentimos y él me miro— mi prometida te busca, Owen, apresúrate.
— sí señor— Dije rápidamente— nos vemos chicos
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Una vez que dejé mis cosas en la sala de residente corrí a buscar a la doctora Coleman.
— Aquí estoy doctora Coleman— Dije rápidamente.
La doctora Coleman alzo la mirada y me miro— Llegas tarde— Dijo un poco molesta.
— Bueno es que yo... — No pude terminar porque ella me interrumpió.
— Owen, no quiero una excusa, además estoy de muy mal humor, vamos— Ordeno.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Luego de unas rondas llegamos a una habitación en la sección VIP.
— Bien, ya debes saber que este no es que cualquier paciente, los chismes corren rápido en este hospital— Dijo
— Sí doctora, es hijo de la dueña del hospital— Respondí.
— Sí así es y también ha sido mi paciente desde que yo era residente— Dijo seria— cuando cometí un error, él me salvó de terminar en la calle, él es muy importante para mi, así que todo debe salir bien, ahora vamos.
Yo asentí y la seguí detrás de ella, nos acercamos a dos chicos que estaban en un sillón de la sala de espera, ambos tenían una expresión muy preocupada.
— Hola chicos— Saludo la doctora Coleman.
Ellos al verla rápidamente se levantaron.
— Doctora Coleman— Pregunto el joven de cabello negro.
— ¿Cómo esta él? — Pregunto el más bajo de los dos
— Ambos hicieron lo correcto, hicieron bien en traerlo, Ángelo ahora mismo está estable, así que pueden estar tranquilos
La mirada del chico más bajo se fijó en mí.
— ¿Quién es él? — Pregunto un poco molesto.
— Soy el doctor Owen Wilson, es un placer— Me presente.
— Él es residente en cardiología, atenderá a Ángelo— La doctora Coleman hablo.
— ¿Hace cuanto eres residente? — Pregunto el chico más alto.
— Este es mi cuarto año— Respondí.
El joven más bajo se rio. — Samantha ¿Dejarás que un novato trate a Ángelo? ¿Te recuerdo quien es Ángelo en este hospital?
— Lo sé perfectamente y por eso lo elegí para que me asistiera en este caso, es mi mejor residente.
— Es demasiado joven— Respondió.
— Señor le puedo asegurar que mi edad no tiene nada que ver con mi capacidad, yo soy… — No pude terminar de hablar porque el mocoso me interrumpió.
— Cierra la boca— Dijo de forma arrogante— Lo que tengas que decirme no me interesa a menos que se trate de mi Ángelo.
— Ya basta— Dijo su amigo— No es momento para que te comportes así.
— Owen es mi residente estrella, es muy inteligente, Dylan. Tiene memoria fotográfica, es muy eficaz y es perfecto para este caso— Sonrió.
— Mientras no mate a mi Ángelo me conformo— Me miro— Si llegas a cometer un error, te juro que hare que te despidan.
Enserio es un mocoso muy arrogante.
— Owen— Me llamo la doctora Coleman— Ellos son Dylan Bonnati y Will Jensen.
Will sonrió un poco angustiado, mientras que Dylan mostraba una gran mueca de disgusto.
Al parecer el niño bonito ya me odia.
— Vamos, sé que quieren verlo, así que ya pueden entrar.
La doctora Coleman nos guio hasta la habitación. Claramente era una habitación super lujosa y VIP, porque claro, él es hijo de la dueña.
Dylan al entrar y verlo no dudo en correr hacia él.
— Ángelo —él se acercó a la cama y toco su rostro— ¿Qué fue lo que pasó? — Pregunto angustiado.
— Estamos esperando los estudios, lo único que sabemos es que tuvo una arritmia cardíaca lo que provocó terminara aquí— Contesto la doctora.
— Salven a Ángelo— Will hablo mientras nos miraba— es muy pronto para que él... él no puede morir, tienen que hacer algo.
— Will, cariño, te puedo asegurar que eso hacemos, él estará bien, después de todo también es importante para mí como para todo el hospital— La doctora me miro— Owen.
— Dígame— Conteste.
— Te harás cargo de él, estás en el caso— Ordeno— Su archivo medico está en aquí— Me paso la tableta médica.
— Sí doctora Coleman — Conteste.
— Debemos llamar a la señora Raquel— Will hablo.
— No lo recomiendo aun, Ángelo esta estable y quiero ver que pasa con los análisis, ellos dirán si la señora Raquel tiene que venir— Contesto la doctora.
— Está bien— Respondieron ambos al mismo tiempo.
— Samantha, vamos a... necesitamos seguridad— Dijo Will preocupado.
— Sí, las fans pueden entrar y Ángelo debe descansar— Contesto Dylan.
— Eso ya está cubierto, Owen— Me llamo— quiero informes de él de cada hora, él es un paciente MUY especial, recuérdalo.
— Sí doctora Coleman.
Ambos salimos de la habitación y vi a esos dos chicos tomar las manos del paciente, se ve que lo querían mucho.
• ────── ✾𝕃𝕒 𝕔𝕦𝕣𝕒 𝕖𝕣𝕖𝕤 𝕥𝕦́✾ ────── •
Pov Dylan
Metidos en nuestros pensamientos el sonido de un celular sonando nos alerto, revise mi celular y no era el mío
— Es tu teléfono, Will— Dije.
Will saco su celular y vio quien era. — Es Nathan— él contesto y puso la llamada en altavoz— Hola.
— ¿Cómo esta él? — Pregunto angustiado
— Esta estable, nos asustamos mucho — Respondió.
— Gracias al cielo, yo...trataré de ir— Dijo rápidamente.
— Pero ¿Y tu película? — Pregunte.
— Veré si puedo adelantar mis escenas— Dijo angustiado.
— Nathan, él está bien, está estable— Dije.
— Solo… llámenme si pasa algo— Pidió.
— Claro que sí — Respondió Will.
— Adiós.
La llamada finalizó y mire Ángelo. Era de noche y ambos habíamos decidido quedarnos.
— Dylan— Me llamo.
— Yo… solo espero que este bien — Dije.
— Así será— Toco mi hombro— no nos puede dejar aún.
—Voy a… voy a ordenar que nos traigan ropa— Dije mientras me levantaba.
— Claro.
Salí de la habitación y me senté en uno de los bancos de afuera, saque mi celular para marcar a mi agente y mi mirada fue a la estación de enfermeras, pude reconocer rápidamente a uno de los doctores, era el doctor al que grite hace unas horas, sin pensarlo Ángelo llego a mi memoria.
— No, no lo quiero— Dije mientras me cruzaba de brazos.
— Dylan— Mi asistente me miro cansado.
— Consigue agua con gas o te juro que no haré la maldita entrevista — Dije molesto.
Mi asistente salió de camerino y Ángelo me miro.
— No deberías ser así, deberías comportarte mejor.
— Es un idiota— Dije— sabe que tomo agua con gas.
— Dylan, debes dejar de ser tan modo diva, la gente también siente, no eres el único que tiene sentimientos, tu asistente no es un robot que no siente lo que le dices.
— Ángelo— Dije tratando que se detuviera.
— Hazlo, no digas más y pide disculpa o juro que te meteré un jabón en la boca— Dijo molesto— Debes ser tolerante, debes ser humilde, esa gente se gana la vida como tú y como yo lo hacía, así que cambia esa actitud.
— Bien, ya no me regañes.
Ángelo siempre ha sido bueno con los demás, mientras que yo solo lo soy con mis compañeros de trabajo y fans, porque con los que trabajan para mi...pues no tanto, me sentía apenado por lo que hice, sabía que no debí gritarle.
Tome mi teléfono y marque a mi mánager.
— Hola...si soy yo... quiero ropa... para Will y para mí...nos quedaremos esta noche en el hospital... pues la cancelas y ya... no, has lo que te pido.
Corte la llamada y camine hasta el doctor al cual le grite.
— Disculpe
Él joven se giró y dejo decir que es MUY apuesto
— ¿Sí? ¿En qué puedo ayudarle? — Dijo de forma Seria.
— Déjeme presentarme— Sonreí— soy él idiota que le gritó de la manera más agresiva y estúpida esta tarde
— dijo apenado.
— Muchos idiotas me han gritado el día de hoy— Él sonrió y pude ver que tenía una hermosa sonrisa— Sé quién es.
— Por favor, acepte mis disculpas, yo... estaba preocupado— Dije.
— No se preocupe, enserio, entiendo que estaba bajo presión, su pareja... — Lo interrumpí.
— No, él no es mi pareja, es mi amigo y primo, por cierto— Soy Dylan— Extendí mi mano.
Ambos nos dimos las manos y este sonrió.
《Sin duda me enamore de su sonrisa》.
— Es un placer, bueno si me disculpa debo irme, tengo paciente a los cuales atender— Contesto.
— Sí, claro
Él se dio la vuelta y se fue, claro que yo sonreí.
《¿Tendrá novio/a?》