Hasta que la muerte nos separe.

ad, no solo porque es la única mujer de la familia entera, sino que también porque él la crio, y gracias a eso pudo seguir viviendo y es que en ese entonces hacía un año el hombre había perdido a su ú

n una familia unida y armoniosa, a decir ver

e la joven, y sus tías trataban de ser la madre que ella siempre necesito, aunq

a y es por eso por lo que eran sumamente hostiles con cualquier hombre que tratara de acercarse a ella, no i

niña que, con solo 2 años, había perdido más que cualquiera y algo que ellos con todo su dinero y poder que poseí

le tocó averiguar que la vida no es color de rosas, que una palabra te puede dañar más que mil golpes

e la puerta, y yo solo quiero

sé que lo disfruta

evitar levantar la voz al terminar de h

gritos, ahora mejor vete, está

adolorida, ¡¿que hice?! las tías me lo advirtieron sie

conversaciones que le tocó tener con sus tres

s o hermano cerca, nunca, no confíes en tus amigas, ellas pueden d

o ten presente que si algo te pasa matar

tomar y divertirte, pero no hasta marearte, nuestra voluntad a veces flaquea cuando bebemos, y

quería, yo le dije que NO, eso lo recuerdo, no

conocía entro, estaba asustada, estaba so

ú y que haces en

cerraba parecía un pez, pero no salía sonido alguno, mientras sus lágrimas caía

sar nada malo de su hermano menor, después de todo acababa de volver al país, y no sabía si era la novia o amiga d

n más ella se levantó y salió casi corriendo,

rmanito por fin cambió de gustos?

ino, y es por eso que estuvo varios años viviendo en el extranjero, volviendo al país por una enfermedad que aqueja a su padre Jack y por pedido de su madre Nancy, quien le pidió ayuda con sus hermanos, J

staba ofreciendo en su honor, eso estaría bien, si no es por el hecho que su padre estaba en el hospital, su

cama, la fiesta ya había terminado, pero no fue eso lo que lo aturdió, lo que es

no, no, no mi h

esta ya había terminado, su corazón latía tan rápido q

Jar

m?, ya es tarde

uarto?!— podía jurar que su rostro estaba

o que te diga!, ella quería, ahora que no mienta. — las pal

sintió que su pregunta salió con un débil sonido, trataba de r

oco de acción y se

su interior le decía que

ny, una niña mimada, ya sabes esas que se hacen las mosc

s, por lo que encendió la luz para decirle que le explique qué era lo que est

y la marca de dientes en su hombro, una clara ev

ste de e

achera... ¡ella quería Liam! ¡deja de mirarme así!... Tú no eres nad

¡porque está cansado de

rte ella no dirá nada, no le conviene, o su

¿Q

o la deben dejar, pero claro, por más que preguntes nunca averiguas nada, si puede ocultar sus conquistas, de es

era virgen!, mi cama está manchada con su

crees ¿que vivimos

asaras

juro que la única que perderá será

re estaba enfermo, aunque discutieron por horas, no consiguió nada, ni siquiera un nombre,

e su cama, esa mancha de sangre que demostraba que

aseguraría que el honor d