El efecto de la pantera

y mi propia hermana , aunque fuera de crianza, fue

aban a mí y mis lágrimas se negaban a salir

manos aferraban su muñeca y mi hermana no tenía expresión algu

lo p

o inexpresivo

no quedan complacidos yo mismo te mataré , pero después de que

a fecha conocía me amenazaba arrancando mis manos de la muñ

uando termine con ella me la devuelva ,

ies iban resbalando por el suelo , y cada tropiezo levantaba arenillas y pi

una maleta pequeña plateada y una voz que

a esa niña en cinco meses en mi cama , o el pequeño Allan no obtendrá su dosis . Por ahora me v

la camioneta y me pegué al fondo uniend

mano. No sé que fetiche es el que tiene con las putas que van de santas y se conservan puras has

y tobillos y yo no hice ningu

pia mano sádica , me tengo que dejar tocar por mi tío Dave una y otra vez cada ocasión que me llama al club . No puedo escapar . Hace seis malditos años vivo así . Por supuesto que soy virgen si mi tío así lo exige y si me entrega hoy es po

o el trayecto alzo la vista mirando su mejilla,

peor , abre las pierna

l y tímidamente las empiezo abrir cuando

s que me obligó a usar Dalila de encaje blanco para introducir un dedo en mi comprobando la presenci

iere en su casa . No irá por el club e

a , vamos para allá entonces — y con eso me dejó

y hasta el brillo de los pisos era impresionante. Fui llevada por

iré tampoco , que mande las cinco chic

observé como lentamente un hombre de silueta enorme se acercaba a mí . Su andar pausado era hipnótico y a

tiró una mano y cerré los ojos con mi barbilla temblando , pero su toque nunca llegó , su mano activó el i

evándolo a su nariz. Deslizando su vista por mi cuerpo emb

su voz era tan ronca que me hacía desearlo , me sentí húmed

ser luminosos — casi me golpeo cuando me doy cuenta de l

claridad de ellos enmascaran la oscuridad de mi alma — esto lo dijo sobre mi oíd

el contrario. Quise adorarlo allí donde toqué. Aquel majestuoso abdomen llamó mi atención

ecen y solo yo los puedo morder — dijo separandolos con su

un encuentro — se apoyó con una mano abierta en la pared de la puerta a mi espalda y recorrie

puerta. Me sentía arder por dentro. Su piel hirviendo quemaba en la mía. Otra vez sus manos calentaban más piel , subian y bajaban con desespero por mi espalda . Su boca no daba pausas ni para respirar , estaba siendo un primer beso muy intenso para mí , pero mentiría si dijera que no fue delicioso. Gimió en mis labios y respiramos con dificultad antes de sentirlo otra vez saboreando mi boca. Era como lava hirviendo sentirlo besarme.

jurarme que no te dejaré marchar. Que serás enteramente mía y que dios b

espalda a él empezó a desvestirme con una delicadeza que no esperé obtener esta noche y cada pedazo de tela que quitaba era un

ano. Casi me sentí ofendida cuando ignoró mis pechos en su camino , pero mientras deslizaba mi braga hasta el suelo

oy brutal en la cama y normalmente no tengo piedad con las primeras veces de nad

mna , lo que me hizo arquear mi cuerpo y por fin sus manos tomaron mis senos con suavidad . Los palpó lento , primero cargando su peso y paseando por la redondez

tá impidiendo controlarme — hablaba en mi oído desde atrás de mí y lo sentí empujarme al

subió por mi muslo en su parte interna lentamente y sentí como un poco de mis jugos cayeron sobre su mano

bajo sin descanso mientras sus dedos seguían entrando y saliendo obligandome a jadear y gritar cada vez que hacía círculos en mi centro . Mi cuerpo recostado sobre él notaba su enorme erección y me moría por sentirla dentro , por descubrir como era esa sensación. Un hombre dentro de tí y no cualquier hombre. Sino uno poderoso y vigoroso. Uno que me estaba tratando c

propio , ven ya , vente para mí — aceleró su ritmo

mi metió sus dedos en mi boca uniendo su lengua

di cuenta que estaba en las manos de alguien que di

so. Me tomaría y me dejaría cuando gastara y apagara toda mi luz. E

día negar. El efecto de llevarse dos de mis primeras

z con alguien dentro de mí. Pero miraba sus ojos de pantera a la caza y me daba igual todo. Era ese el

con deseo y tomando mi boca alzo su miembro y lo clavó en m

te posea una y otra y otra vez — es que su voz afectab

Yo apretaba las sábanas y estiraba mi cuello dándole acceso completo. El lo mordía y besaba mis pechos. No c

emoledor. No descansaba. E

me sacaba gemidos y sonoros fluidos . Explotaban en la entrada de mi vagina con c

car con el cabezal de la cama. Puso su mano sobre mi coronilla para

ciones eran jadeos sonoros. Y mis ojos pocas veces se encontraban c

caderas y se afincaba en la cama para entrar más y más profundo y no supe cuantos

ndo hasta el final su miembro ahogamos nuestros gritos en un bes

enos dentro , eres mí , jodido paraíso y me pienso m

do de mi , retomando el brutal ritmo que

noche y amanecí siendo penetra

en la cama. Me había tomado tantas veces que me seguía pr

e sentía igual de

yo pensé ... Y me arrancaría todo , dejá