damente herido por el dueño original de este

arle el desayuno le haría

sintió tris

aberte lastimado mucho en el pasado, pero confía en mí,

l cuerpo si, si quería cambiar el futuro de

po, su nariz estaba llena de la frag

as manos y las dejó a

de decir algo, pero

ñado muchas veces: Valeria en sus braz

n la calidez de su amor, pero temía que

hermosas ilusiones solo para atraerlo al borde del acant

llo, sus manos moviéndose hacia arr

edas darme la oportunidad de corregi

ambio en la actitud de V

os brazos e intentaron abrazarlos a los dos,

tra mamá finalmente cree que

pronto podemos salir y ju

alegría a los ojos

ices de ver a sus padres

aber sido el más feliz, se veía sombr

esa, no estaba segura de lo

n, Lily, vayan a jugar con la niñer

a, se miraron por el rabillo del

untos: —S

os se f

ta, ella regresó y se asomó —Tómate tu tiemp

amá. Acaban de volver a estar juntos. Pa

Lily y cerr

Sebastián y Valeri

omar la mano de Sebastiá

no y camino hacia la

ró las nubes oscuras

profun

vuelos serán cancelados. Incluso el cielo está

a quier

George

recordar la tra

sucedería a continuación sería que Valeria decidió llev

n ya conocía su plan

llevó a Lily con ella y

és de esto, Sebastián

adamente—No, Sebastián,

—No tienes que explicarlo. Sé por qué de repente cambiaste hoy. Solo

irar a Valeria con una mir

a le dolió

rdió el labio

a lastimado tanto que sería difí

lla para que sus sos

do con él el otro día. ¡Incluso pla

o puedo vivir sin ti y los niños. Solo porque George te dijo que lo hicieras; no solo querías huir con él

a pudiera explicar,

. Una de ellas agarró la mano de Valeria y la

hinchados por el llanto;

papá. No queremos ir

de Lily; parecía estar

todo el tiempo. Cuando escucharon que Valeria planeaba alejarlos

tos, pero al menos deberías preguntarles a l

do de persuadir a Valer

ria frente a él no tenía in

su papá. Ellos fruncieron los labio

ligeramente rojas. Eran redondos y

tió el impuls

mi no irá. Papá me entendió mal. Mami solo quiere llevarte conmigo y

vantó los ojos para mirar a Sebastián. Sus p

frunció

staba seguro de si

i, no nos estás mi

s, sabía por experiencias pasadas que su madre se preocupaba mucho p

ién dudaba de que Valeria renunci

iginal de este cuerpo si dudas era una mujer est

niños no l

ad. Juro que si miento, nunca v

ían que Valeria

a menos que tuviera la intenc

án —Papá, creo que mamá no nos mi

e puso de pie y lo miró a los ojos —Iba a pedirte que me acompañaras y

ue me malinte

ijo esto, los ojos de

rme contigo? —Sebastián s

real como

tro de Sebastián; su

ué? ¿Por qué

leria lo tocó tan íntimamente,

se quedó en blanco y

dijo: —Quieres preguntarme por qu

ián as

on George. No te lo diré ahora porq

dio una dul

Sebastián no confiaría completamente en ella

que ella i