img Es mejor alejarnos  /  Capítulo 3 Adoptaremos una bebé | 3.30%
Instalar App
Historia

Capítulo 3 Adoptaremos una bebé

Palabras:1415    |    Actualizado en: 14/12/2023

asamos increíble. Salí de la ducha, José Eduar

flojo, debe

estaba desnuda—. Tramposa, te bañaste sin mí, debes pagar la peni

s, sacándome carcajadas, mientras nos dirigíamos a nuestro gigante baño me dio una nalgu

dañaste el

marido se escuchó en todo el baño.

rte dentro del pecho, así supieras lo mucho que

enfermedad, aunque me sentía feliz porque tenía seis meses sin tomar el medicamento y no había pasado nada, esos

osé comenzó a besar mi cuello, sus manos masajeaban mi piel y en cuestión de segundos ya estaba encendida y dispuesta a dar y recibir place

or, José

su boca a mi oído—. Di

a lobuna me encantaba, la misma que fue mi per

a las baldosas frías de la ducha, pero estábamos tan encendidos que ni lo sentía. Danzar al ritmo de la pasión incentivado por el amo

rostro, si algo tenía claro era que mi marido en sus caricias demostraba lo mucho que me amaba. Nuestros labios danzaron mient

? —Las piernas aún me temblaba

Villalobos, ahora a bañ

Ci

peles que envié para la adopción de una niña. —El labio

mo, g

tamos a un ni

n par de lágrimas se escurrieron de

emos ir hoy a ver a las niñas, podemos escoger, pedí rangos de cero meses a dos años.

e una familia

s, la cita es a las n

blanco que se me ajusta en el trasero, no era vulgar, solo un poco transparente, saqué una camisa de seda de listas negras y

de la camisa—. Ese pantalón es un poco clar

eran una súplica. Iba a

mostrarme esa sonrisa de niño píca

itar, salvo que te presentes en mi of

deleitan

o

ara rizos parezco una gallina matada a escobazos. No me hice la keratina como Maju porque a José Eduardo le encantaba mi cabello castaño rizado. Terminé de

ué te

é uso esto. —Le most

gusta com

so me

es pr

s de la mano al comedor y nuestra ama de llaves nos tenía el desayuno listo. Iba a tomar

la cara amo

también fu

quien solo trabajaba mediodía. Nos hacía el desayuno, almuerzo y dejaba preparado la cena, la cual Dilia después nos servía o en su mayoría de las veces. Yo para la cocina era un traste y José Eduardo ni se diga. Tambi

, no es normal en ti, no t

conocer a nuestra hija. —Dilia me miró—. Así

risteza que me embriagaba cada vez que llegaba el

se momento caí en cuenta que no habíam

ardo! Amor no hemos a

sposo sonreía al mirarme desbordand

o, verte a

ada rato cuando estuvimos de viaje

l que por fin me hicieras caso en adoptar me demuestra que a pesar de, lo retrogra

decir lento d

—acunó mi rostro, hasta a

e desayunar, yo realmente

Di

a? —Le

Quiero que ese sea el cuarto de nuestra hija y hoy señor Villalobos, lo necesito tempran

empe

a crema dental me dio reflujo. Menos mal alcancé a vomitar, ¡carajos! Qué mal me sentía, el cuerpo

img

Contenido

Capítulo 1 Mi verdad Capítulo 2 Feliz Año Nuevo, mi amor Capítulo 3 Adoptaremos una bebé Capítulo 4 Vuelven las amenazas Capítulo 5 Desconfianza Capítulo 6 Miedo a decir la verdad Capítulo 7 La infidelidad no se perdona Capítulo 8 Le tenía miedo a mi pasado Capítulo 9 Se derrumbó la imagen
Capítulo 10 La verdad salió a la luz
Capítulo 11 Es mejor alejarnos
Capítulo 12 Asumir las consecuencias
Capítulo 13 Quedé en el fango
Capítulo 14 Me divorciaré de ella
Capítulo 15 Dos razones para seguir caminando
Capítulo 16 Mi eminente divorcio
Capítulo 17 Sigo cayendo al fango
Capítulo 18 Solo deseo mi santuario
Capítulo 19 Pagué por su servicio
Capítulo 20 Él me detesta
Capítulo 21 Separados
Capítulo 22 Un importante recuerdo
Capítulo 23 Conversación (parte 1)
Capítulo 24 Conversación (parte 2) y un bello regalo
Capítulo 25 Hablar con una amiga
Capítulo 26 No volveré mientras te ame
Capítulo 27 Olvidando en el día – Amando en la noche
Capítulo 28 Llamados de atención
Capítulo 29 Golpes de realidad
Capítulo 30 Tomando decisiones
Capítulo 31 Personas agradecidas
Capítulo 32 Como te extraño
Capítulo 33 Inicios de una ama de casa
Capítulo 34 El tiempo pasaba
Capítulo 35 Serpiente viperina
Capítulo 36 Solo si yo fui su luz
Capítulo 37 Él me llamó
Capítulo 38 S.O.S. A una amiga
Capítulo 39 La mejor visita
Capítulo 40 Cantando al despecho
Capítulo 41 Nacimiento de Eduardo José
Capítulo 42 Una extraña sensación por verla
Capítulo 43 Cantando la tabla
Capítulo 44 Sanando el alma
Capítulo 45 Conociendo a sus nietos
Capítulo 46 La llegada de mi madre y tía
Capítulo 47 Un giro para mis tíos – parte 1
Capítulo 48 Un giro para mis tíos – parte 2
Capítulo 49 Mi hijo ya tiene tres meses
Capítulo 50 Él no va a morir
Capítulo 51 Llegamos a Chile
Capítulo 52 Se encuentra vivo
Capítulo 53 Siempre hay una razón superior
Capítulo 54 Dar sin esperar nada a cambio
Capítulo 55 Decisión acertada
Capítulo 56 En busca de las custodias
Capítulo 57 Madre de cuatro hijos
Capítulo 58 Los meses pasaron
Capítulo 59 Fiesta de cumpleaños
Capítulo 60 Vuelvo a verla
Capítulo 61 ¿Reencuentro o tortura
Capítulo 62 Ahora nos escucharás – Parte 1
Capítulo 63 Ahora nos escucharás – parte 2
Capítulo 64 Frente a su casa
Capítulo 65 Pechiche desmedido
Capítulo 66 Ni loco la dejo ir sola
Capítulo 67 Creo, valoro y respeto la institución del matrimonio
Capítulo 68 Te voy a volver a conquistar
Capítulo 69 Iniciando el viaje familiar
Capítulo 70 Vamos a mitad del viaje
Capítulo 71 Metiches milagrosos
Capítulo 72 Convivencia con los niños
Capítulo 73 Conversación (parte1)
Capítulo 74 Conversación (parte 2)
Capítulo 75 Conversación (parte 3)
Capítulo 76 Estado de shock
Capítulo 77 Escuchando conversación ajena
Capítulo 78 Relación padre e hijos
Capítulo 79 Juegos de seducción (parte 1)
Capítulo 80 Juegos de seducción (parte 2)
Capítulo 81 Cicatrices ocultas
Capítulo 82 Escuchando a un amigo
Capítulo 83 Paredes de protección
Capítulo 84 Espero reversar… para sanarte
Capítulo 85 Reconciliación
Capítulo 86 De nuevo la señora Villalobos
Capítulo 87 Un nuevo temor superado
Capítulo 88 Plenitud familiar
Capítulo 89 Siempre hay enseñanza en la gente que te rodea
Capítulo 90 Estamos embarazados
Capítulo 91 Epílogo – Plenitud
img
  /  1
img
Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY