íe al lograr

de campo d

na fiesta que solo es

quiénes somos, bueno solo

ve

más recuerda que podrías p

r, así que de inmediato lo rechazo porque aparte de re

puesto, Alan votara baba por ti. —eleva ambas cejas al mism

ro siempre sabia como convencerme.

guía amándolo o solo eran corajes por verlo feliz con otra cuando yo pienso

eía como una segunda piel en mi cuerpo, un escote que realzaba demasiado mis senos, en el costado derecho e izquierdo de mi piernas tenía una enorme abertu

legría Jessica —Vamos, hay que mostra

o no caerme con

iempre ambos estaban afuera, Alan no deja de besar a la

vidé las lla

vieron a mí, los ojos de Alan se agradaron cuando me vieron, se levantó de su lugar sin dej

sa corre hacia su auto así que me subo después que

s dejó pasar. Al ver la enorme mansión rodeada de mucha multitud que eran

, no uses tu nombre, porque se

so es

o le dicen noc

del auto ofreciéndonos su mano, "¡dios me si

campo de la familia Smith.

casa de campo, me imagin

ados Mari.—murmura mientras

emás reunidos, siempre me imaginé una fiesta de

resa sin permiso por un hombre que me robó el a

to mantener la calma pero se me dific

to y sus labios en mi mano, sonreí como una

go que valdrá la pena —pero que

estremeciéndome cuando siento sus dedos hacer peq

ción sexual, en pocas palabras, coger toda la noche. Y más al darme cuenta q

exual que jamás había experimentado con nadie ni siquiera con Alan, emocionada me acer

me felicita —Ahora con

—dije co

telo. ¿O me dirá

puesto

yo ya conseguí un hombre que está como

ué?

s ella, me da un mendigo abrazo y se va co

bo fijo durante dos horas. Estaba sola, sola con mi maldita consciencia que solo me decía "¿Que haces aquí, vámonos

dama no deber

hombros desnudos, cierro los ojos disfrutando de esa

nto de mi lugar para verlo a la cara, ¡,d

mente hasta el escote de mi vestido que muestra demasiado mi

aciendo que muerda mi labio inferior p

medio de mis tetas, mi mente se nu

iente

isiona a su cuerpo nuevamente y mi voz se pierde cuand

tregarme así a la primera aún hombre que podría tener una enfermedad

la acompañe

ía un problema, así que opté por rechazar pe

—Vuelve a

ón es más potente y sin más, me besa, un beso feroz lleno de deseo y excitación, su lengua lucha contra la mía, u

tan duro como una roca, pero sorpresivamente me hace

ndo tatuaje. —siento su mano acariciar el tatuaje

s Maricela?, aléjate ante

s Mar

o empujé asustada y me doy cuenta que esto era un juego para él porque

confundida y asustada.

borrar su sonrisa. —Lo sé

este tiempo había estado