RA. [Pa
dolescente soñadora en pleno auge, también podría decirse que durante ese tiempo me abrí paso a m
s
do para chicas rebeldes, en dónde no me fue much
casi
penas giré la vista, lo primero que imp
fue directo hacia mi nariz h
e dí, le dí.... ¡
ontón de risas e
abuelita?, ¿te los tejió tu mamá? — C
igues tan gracio
femeninos, que comprar calzones extra grandes en las tie
a una chica atlética, alta y con facciones varoniles, ta
con eso, bichito raro
ra ocultar tus piernas peludas de macho. — Sus me
ntes dispuesta a irse sobre mí, pero antes de que hiciera al
tó y esa acción me dió tiemp
o una de sus amiguitas logró alcan
engo, c
de rodillas ante camila y por má
lvaje! — Esto te enseña
entonces decidí cerrar mis ojos esp
a y detuvo el brazo de la chica, acap
o olvidaré que eres una... chica. — La voz grave qu
a plantado frente a Camila como u
en, por eso retroceden poco a poco hasta que se alejan de nosotros, Camil
mantiene atrapada allí
un leve quejido, me mira asustada y
y durante unos segundos lo detalle por completo, tenía meses sin verlo, su e
por qué no me d
e, Bastián? — Le rec
estuviera aquí, pero también estaba furiosa
ferido esas chicas me
taría bien, ¿No lo crees?. — Dice sonriendo y sus ojos se
rol. — Me di la vuelta para ocultar mi vergüenza y comencé a caminar en d
s manos me rodean en un tierno abrazo, disparando un centenar de
furiosa pero la verdad es que
jar que esas chicas te lastimaran. — Dice con suavidad, su voz tranquilizadora t
o aprender a defenderme por mi misma. — Me solté
o, recuerdo la primera vez que atravesé las puertas
impregnada de pecas y esos..., ab
e contigo. — Sonríe descaradame
ndo entre nosotros, es imposible,
hibido por el cuál tarde o temprano te
a feroz, al igual que la curiosidad.
sin perder vista de su rostro para estudiar su reacción, sorpre
.. Bu
a voz de Demian Hudson, el pad
ina la cabeza con respeto hacía mí en modo de saludo, pero en cuan
cabello en un tono gris y unas cuántas ar
n perspicaces com
ando era más chica y me dejaba du
zarlo finalmente, aspiré su aroma a loción y a tabaco de su uniforme antes de separarme. Su aura
uánto te extr
señorita Ford. ¿No es así, hijo? — Le da una mirada
Si
astian, ambos tenemos la guardia baja, deseo tocar
an, tajante y eficiente, rompiendo nuestro hechizo.— Por favor no ta
or mi padr
. — Lo interrumpí y se quedó en silencio mientr
l palpitar de su corazón qu
fasc
ió con Cecilia. — Dije para camb
sa aparentemente con un chico mayor que ella. La verdad, nunca pensé q
s que está embarazada. — Bastián inspiró profun
s inesperado. — Le di
rdadera razón de que Cecilia huyera e
do todo lo posible para encontrarla. — Asen
e se acercara, pero aún así solo dió un par de pasos has
por mí, solo significaba una cosa ; El muy malvado está tram
rápido que pude, de pronto, sin emb
iato, entonces, veo cómo sacude rápidam
s! — Me gritó
rtate! Ten cuidado. — Exclamó con miedo levantan
. Tranq
nenosa, no pu
que se encontraba a un lado, luego la acaricié suavem
era tan c
que es, para mí es la compañe
rio y finalmente tomé la mano de B
usurró con vo
silencie. — Tod
boca para succionar l
re con necesidad
oírlo salir de sus labios es un festín de sensualidad... Ca
para acariciar mis la
muy sexy
a» fue todo l
por mis hormonas, de que esto pueda ser real,
e, delicado per
onsecuencias pero no me importa, así que me armó de valor
arlo no me importa que este mal o que sea verg
pechos endurecidos, los pezones erectos y la presión en
nto y aunque siempre luché por suprimi
itud, como si estuviera esperando que lo apartase pero en cambio, lo dejo continuar, tambié
a ti" — Alcance a oír. — No puedo sopo
ir? — Me separé de é
e era perfecto hace unos
frecerme a los buitres para cerrar un trato, cómo si fuera un obje
bre dónde posiblemente se hagan alianzas y tal vez tú futuro mar
eso ya l
La frustración
as una jodida despedida? — Se pone
ara. — Inmediatamente se me enco
a pero no es contra él sino que va d
Dije sin apartar la mirada, mient
amor de mí vida, pero no dejo de pensar