él, y se sentó a la mesa. Robert se volvió hacia Charlen

la miró en

to idénticos, y la observaba con los mi

y aturdida cuando una i

s los s

.", empezó

ambiaron miradas antes de

los mismos ojos inquisitivos, como si le pregun

ginación de ella. Los ojos de Jax er

s mostraban inocenc

smo aspecto, pero no dab

equivocada?'

confundida mientras los

en? ¿Tienen algún

no dieron ninguna respuesta. Por el contrario, miraron los

vio, estaban

una criadora de perros c

s, su corazón no p

llenó sus cuencos de arroz. Luego el de ella hasta l

estaba medio lleno. Su mirada se oscureció misteriosamente, pero luego su boca se

hizo lo mismo, comie

os eran hábil

a que tenían las mismas expresiones y el mismo temperamento. Aunque no se pare

s notó

erse las lenteja

el pimiento verde,

surgió en los hermoso

a en el plato del pequeño, observándolo

dieta equilibrada con mucha nutrición para que estés san

xpectante mien

te, frunció el ceño y miró l

resión de Robert por

ada de asco mezclada con

ró los ojos y son

e a él también para que pueda probarlas. Si él piensa que e

cabeza para mirar a Robert, cuyo rostro se congeló en una expresión

ijo en un tono dulce: "A los niños les gusta comer alimentos poco saluda

lentejas en el plato de

able, tenía un toque de

robustas defensas que rodeaban el corazón de Robert, quien volvió la cabeza hacia s

palillos, se llevó la lenteja a la boca, masticó con una sonrisa y, aunque le p

ido sus lentejas. Tú tam

era amable y dulce, y su mirada gentil y pac

beb

nas madres llamar a su

os palillos, llevándos

se dibujó enton

amente mientras preguntaba dulc

cuidadosamente. Sus oscuros ojos parecían rebosar de satisfacción. Incluso Jax, que rara v

vor, tom

s asintieron a

.. son padr

smo tiempo, aún

ngullendo su comida, rá

jara tentar por los platos caseros y se dejara engañar por una mujerc

mbrado a los accid

rostro desapareció. Se limitó a sonreír encantadoramente

buen ojo,

os, pues su mente estaba más ocupada

paz de tener una erección,

bía visto y tocado

había enamorado ni dejado sedu

y moviéndose seductoramente, pero él

estaba un poco enojada, y e

ra, "Char", que salió

e a un hombre extraño que la había visto desnuda. Ella le había permitido descaradamente entrar en su casa y había a

ene, ¿por qué ere

ió que las miradas de padre e hijo se apar

rla y el desdén brotaban de lo

lo que él más despreciaba. El hombre parecía ver

ientras golpeaba con fuerza la mesa y se

observaron al mismo tiempo, con aso

enfado de Charlene