casi todo el día

neurológico, así que aunque tenía veinticuatro años, su

nó en prisión, y el impacto sumió a su madre en una profunda depresión. Poco después, el negocio fami

os de Katherine, quien, de la noche a la mañ

ento por mantener unidos los pedazos rotos de su vida. Después de casarse con Julian, por un momento creyó

ntenido enterrada en su interior, haciendo

larke, su madre, se le acercó. Ella trabajaba en

e. "Seguramente Julian ya salió del trabajo

orciando de él", respondió la

y luego preguntó con incertid

ió la otra. "

herine, tienes que entender... las personas como nosotras... no podemos esperar que los Nash nos vean como sus iguales. Ellos son muy or

madre, atónita. "¿Quién te contó

corazón, no podía decirle la verdad. "Soy inútil. No pude protegerte. Pero querida, sol

ar detrás de los acontecimientos de anoche. Solo ella podía mover los hilos de esa manera, y probablemente también se le habí

madre, algo dentro de ella se rompió. La amargura en su interi

o de paz y amor. Esa realización la hizo apretar los puños a los costados. Ac

su familia, también tenía la fuerza para vivir por sí mism

a probar su inocencia? ¿De verdad puedes quedarte de brazos cruzados mientras pasa veinticinco años

os, ¿no crees que ya lo habría hecho?", respondió Katherine con u

ía a nadie más, ningún otro salvavidas. Pero una vez que pronunciaron los votos, vio el disgusto en su rostro,

enjugó las lágrimas y dijo en voz baja: "Kathy, los Nash... no son p

o dormir. No dijo nada más, simplemente se dio la vuelta y se marchó en silencio.

ivorcio", le informó Cayson, acercándos

do. Luego, sin decir nada, extendió len

..

asa y encontró a una nueva

iente y capaz de manejar el hogar sin esfuerzo, pero él no la mantuvo por mucho tiempo: la despidi

rutina no se olvidan tan fácilmente. Naturalmente, su cambio de án

oficina. Apenas cruzó la puerta, lo enc

enfermo", comentó la recién llegada, intentand

preguntó él, mirán

digas que realmente te estás divorciando", come

, inquirió Julian, en