ta

ón muy baja cuando llegué aquí, por eso el médico me había puesto bast

ro horas, por lo que también necesitó ciertos cuidad

asunto que se manejó al margen de la ley común, D

rmó de todo el asunto, así como también nos dijo que estába

la ausencia de información sobre lo que pasó con mi marido en aquellas veinticuatro horas en las

salud tan delicada, teniendo ya diez semanas de embarazo, estaba tan sal

tado antes, sin embargo ahora, me pregu

con Ashton ?¿Por y par

— decía Ashton, sacándo

, mientras lo intentaba hacer yo sola, por d

quí con vestigios de lo que fue mi vestido de n

s pero puedo intentarlo — sonrió simpático, caminando hacia

o estoy intentando yo, no patear tu hermoso culo por come

ía se ajustó, indicando aho

erales de mi cuerpo, provocándome, mientras subía sus manos hasta el broche de mi sostén, caminando co

ila y me reí a gusto del ingenio de Ashton, para lib

n, lo detuve, tomándolo por el codo y hac

lamar a las únicas dos personas que p

ia? — preguntó y le conté de mi so

móvil y llamé a Douglas. Por supuesto el

arder la sangre, al saber que el desqu

go bastante improbable de mí — ya te dijo que la

sh. Hoy veré a mi mell

? — su pregunta me hizo suspir

as por pasar — caminé hasta el y lo abracé por la cintura, mientras el hacía lo mismo conmigo —

de el día de la boda. Los habían mante

es como mi hermana había acabado

e estaba a punt

rdo angel

uridad, que estarían con nosotros hasta que llegáramos a la c

uevamente Steve estaba a cargo .Al parecer, ella tenía mucho que ver en el c

m

ones agitadas que desemboca

xpuesta y yo me sentía muy caliente.

orque no hay nada en este mundo que vea mas q a tí. Y así fue que te salvé, me tiré al suelo y alcancé tomar tu mano, aunque no pude impedir que te golpearas el rostro contra las piedras y te desmayaras; pero te salvé. Te hiciste quemaduras de fricción y me he ocupado de curarlas. Busqué médicos solo para tí, y te he besado cada espacio de piel, esto

in moverse de su asiento. El estaba justo delante de mí y ya aquellos cuatro dedos se me metían dentro como si les sobrara espacio, Aídan se ma

n mi clítoris y casi me caigo del salto

orgasmo — pero yo te amo Amaia. A mi manera rara e intensa, pero muero por tí, por esto — sacó los dedos de pronto y hundió su lengua del todo en mi vagina. Yo grité, me removí. El apretó sus manos en mis muslo

e responder nada,

a su voz casi dentro de mi vagina, se levantó

aba que me cayera de allí. Estaba encorvaba y siendo brutalmente acome

sitio para profundizar los embite

n control, sin medidas y sin poder evita

manos me incrustaban en su erección haciendo fuerza para ayudarlo a entrar más en mí, pa

Aídan Douglas

fueron tatuajes a mi piel. Tatuajes hechos por su boca ardiente y que no eran más que evidencia del

me soltó las manos de la espalda y me cargó, levantándome d

ferraba a su pelo con lujuria, mordía sus labios con furia y era incapaz de abri

on un ritmo salvaje, casi inhumano. Solo alguien tan violento como el, podía follar

razos, y sus manos abiertas casi sobre mis hombros me encaj

lo, que aún no se cómo no se quejaba. El era

rando un oxígeno vital para los dos,después de aquel orgasmo explo

encrucijada, porque hay calles sin retorno, así como cosas sin arreglo. Y eso era

osas, verdad? — pregunté en su oído,

mi hombro, dejando su boca c

e veía los ojos, porque no se movía de su s

tan alto, que no puedo prometer

intió dolido y yo me sentí morir, pero era

arando para dejar