sado años. Cojeaba ligeramente al caminar, un recuerdo constante de la bala. Su rostro era nuevo, obra
esta de compr
Le había dicho q
levó a la finca familiar, sino a un lujoso penthouse
era su propio espacio, seño
a la ciudad. Dejó su pequeña maleta en la entrada y caminó hacia el enorme venta
o tuvo
incipal se a
omo una tormenta. Detrás de él, dos de
un traje caro. Pero sus ojos estaban inye
con un despre
tenido", dijo Ricardo,
ió el ceño,
creo que ha
Ricardo. "Sé exactamente quién