o Roy y a nuestro hijo Leo en nuestra hermosa finca d
años, le susurró a su padre en euskera: "Papá, quiero que t
gre: "Tu deseo se cumplirá muy pronto", revelando que mi pro
partamento en Miami, confesando que solo me había desposado por presión familiar, c
l que sacrifiqué mi carrera y salud me despreciaran de esta man
ido una cura a cambio de rehabilitar a Roy: "¿Desea solicitar la desvinculación final?", a lo que