este olivo milenario, y mi
durante mil años, es una deuda d
dero, creció bajo la
, me prometió que
o, Isabela", me decía, "Nunca
le
cómo el vino Montero se convertía en leyenda gracia
todo
ó So
vinos, su sonrisa es tan sup
s eran un lastre, que mi olivo era una superstici
teo se convir
nual. La música es estridente, las luces
ateo reír con Sofía, el
tropieza y se rasguña
nte, pero ella grita como
!", chilla, con lágrimas de cocodri
la única que conoce mi ve
a", dice con calma. "El olivo es
abuela. Solo tiene ojos para
e su devoción a ella y no a mí
árbol! ¡Ahora m
do se
a vital s
con la conexión que si
e matarás. De
e ig
el brazo, le recuerda las prome
te sacrilegio! ¡Condenta de ella co
de viejas, abuela
motosierras y maquinar
rdecedor desg
la madera mile
ota de mi ser mientras
unto a las raíces expuestas, mi
llo, mi cabello se vu
iglos en u
con un estruendo q
xión se
imaginable
el