do lo que valoro. No importa si es un novio, un amigo o incl
sde que éramos
una relación, mi madre, en su afán de presumir, se lo contaba a toda
lla seducía a mi novio, lo exhibía como un
bargo, las cosas
stillo? ¡El heredero de los hoteles Castillo! ¡Qué suerte tienes!",
calma, mirando mi reflejo en la v
Scarlett! Ya sabes cómo es. ¡No d
"No te preocupes, tía. E
ubasta de arte yacía junto a una foto. En la foto, un hombre carismático y ap
o era un
y la víctima. S
no es m
el
rlett, la depredadora que finalmente caerá e