a optado por una blusa color crema, una falda lápiz gris y el mismo par de tacones i
día o
personal
a extensión telefónica propia y, por supuesto, el sobre manila con las
o 32 se abrieron, la reali
la m
ad. Ni siquiera
escon
ju
una sonrisa ladina. Dos ejecutivos detuvieron la conversación apenas Clara pasó ju
itorio frente a la oficina del CEO con la espa
la atención. Finge que sab
aba encendida. Un correo de Alexande
Tareas
nión con Alia
mentos legales por
zo con directivo
rrama
dar el
.
los últimos dos puntos, pero no dijo
nos, lo
oría. Pero su sistema requería una contraseña para acceder a
tiqueta "CONFIDENCIAL". Eran papeles llenos de términos legales y números q
desarmó, y vo
contacto de Innovatech, un
es ser
antes había murmurado en voz baja. Usaba un vestido ajustado,
a, ¿c
Bueno
mina arreglando los desastres de aquí. -Hizo una pausa
sonrió
gu
jo: aquí, si no sabes lo que haces, mejor
a-. Pero no te preocup
acceso directo al CEO. Inte
a encima del teclado y s
de abrir la carpeta. Ni siquiera era para ella. Era un informe que debía ir
na reunión por teléfono y corregido los documentos legales despu
la máquina d
ascada cuando intentó sac
uró al ver el líquido d
, y regresó con el café tibio justo a tiemp
robó. Silencio. Luego, sin apartar la
ayer. Aún i
retó los
aprender a h
a fórmula -replicó él
a burlando de ella. Pero su tono h
lián, el asistente legal, que le entregó
. Eso ya es
le fue a l
inco horas. Mi favorita fingió una emergenci
e llevas b
irectamente a los oj
a sensación no duró mucho. Cuando volvió a su escritor
tas a almorzar. Algunos pues
rma. Ni fal
io con una botella de agua y su carpeta. El sol estaba fuerte, pero
libreta
1 of
das hostiles:
sarcásticos:
errama
os mezcl
ndirme: 0 (
iar en rubias con ta
acercaba y se giró ráp
manos en los bolsillos del pantal
te es
e permito cinco minutos sin que me
a su lado y observó la
o dije
ué
a más de una s
canta romper
la miró
il de trata
ácil de rendir
se le escapara el gesto. Lue
aprender a ignorar rumores. Y mantener la c
sejo o una
cional. La número
cía... cansado. No físicamente, sino emocionalmente. Como
ndo -dijo ella
o de lo qu
e dio la vuelta y
unos segundos más, mirando al
nos para
demostrar que