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temido de la ciudad. Él pone la fuerza bruta,
a que descubrí que llevaba nueve años con su amante,
raición no fue el r
amante apareció desquiciada y me
da se me escapaba entre las pierna
plicando ayuda mien
r no corri
hacia
legítimo en el suelo frío, él abrazaba
", le susurró, dándome la esp
amor se convirtió
nco millones a un paraíso fiscal y envié las
l ha cruzado una tormenta
perdón porque su imperio se desmor
sentir nada
ver. Ahora obsérvalo c
ítu
Vitiel
millones de dólares de la cuenta secreta de mi esposo a un paraíso f
nte, me alojaría una bala en la cabeza an
e su arrogancia es más
o mis pies descalzos está helado, pero no tanto como el vací
mo le gustan al Don. Tal como Óliver me ex
a abajo.
a tres rivales con sus propias manos para conseguir la mía. El hom
clinado sobre
sa el cristal de la puerta del balcón y se clava en mis oídos como
al. Es posesivo. Es el toque de un hombr
erce violentamente. No es solo asco. Es una reac
o. Yo era la hija de un soldado retirado, educada en las mejores escuelas de fina
e bodas, con las manos manchadas de sangre a
nt
una maldi
olvida que yo diseñé sus protocolos de seguridad. Nueve años. Llevan n
dejarme aquí, como una imbécil, manejando los libros
stardo. Un insulto directo a
a vista hacia la
i presencia fuera una molestia menor, como una mosca en su copa de vino Ba
se maldito g
esposa. No soy más que su contadora glorificada. Soy la herram
tido dinero de drogas y extorsión en
enes. Y él me trata como
e de la mañana huele
al que me dio hace años, cuando confiaba en mí ciegamente porque creía qu
lta y entro e
a muerto. La Laura que esperaba un be
l lado, abro el libro negro. El verdadero libro. El
es poder. Se equivoca. El
o una línea sobre una cifra en la cuenta
é expuesto ante la Comisión. Sin dinero, no puede pagar a
la habitación vacía-. Crees que cantaré par
rden de tr
y la hoja de la guillotina.

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