img Un matrimonio de mentiras  /  Capítulo 2 | 33.33%
Instalar App
Historia

Capítulo 2

Palabras:1833    |    Actualizado en: Hoy, a las 16:07

a Rey

al hombre por el cuello de la camisa y lo estrelló contra una pared cercana, esparciendo piezas de arte y haciendo que un lienz

enas audible sobre el pulso restante del bajo. Su rostro era un

ido, retrocedió, fr

hablando, Gae

, acortando la distancia-. ¿Te besó? ¿Justo delante de todos? ¿Justo

ndo el equilib

Hielo, Eliana Reyes. ¿O ya te olvidaste de tu matrimonio arreglado? -Sus palabras r

e algo crudo y desesperado cruzando su rostro. Luego, en un movimiento que sorprendió a todo

e levantaron, empujando

de Gael, luego con su espalda. Gael no se inmutó. Se aferró, su rostro enterrado en el hombro d

ino de emociones: deseo, desamor, desesperación y una posesividad tan intensa que era escalofriante. No era

a habitual, sino una comprensión paralizante. El caos que había intentado manejar, la rebeldía que había descarta

omento de ternura que me había ofrecido en público... no se trataba de mí en absoluto. Se trataba de él

stración por su naturaleza descontrolada, se evaporó, reemplazada por un vacío aplastante. Sus emociones vibrantes, su energía salvaje, su profundo d

nte ordenado, mi fachada de hielo, mi identidad cuidadosamente construida... se sentía co

a ello. La multitud comenzó a dispersarse, Gael y Adán todavía encerrados en su silencioso y dolo

omenzaba a vaciarse. Gael y Adán se habían ido. Parpadeé, mis ojos ardían. Sen

lada casa, supe lo que tenía que hacer. Tomé mi telé

arcos-. Su dirección actual, su estado financiero, sus contactos, su

ó sorprendido-. ¿Busc

uien a recoger una memoria USB segura de la caja fuerte de mi oficina. Te

dido,

ersonal y oculta. La mayor parte contenía fotos antiguas de Adán y mías de la universidad, nuestros encuentros secretos, las promesas susurradas. También contenía los detalles del canal financiero que hab

do a Adán, el rostro atormentado de Gael, el desafiante de Adán. M

en mi escritorio, la luz de la madrugada proyectando largas sombras

áneas de exposiciones de arte, cenas tranquilas, incluso algunas borrosas de algunas de las fiestas más escandalosas de Gael. Gael, siempre mirando a Adán con una intensidad que quemaba a través de los píxel

hé en algún lugar del éter digital. Los comentarios efusivos de Gael sobre las primeras y poco pulidas canciones de Adán. Las bromas juguetonas de

rechazado consistentemente oportunidades lucrativas que lo alejarían de la ciudad donde vivía Adán, cómo había invertido en el sello musical en apuros de Adán, cómo incluso había usado su propio arte para crear

ejado de Adán años atrás. Incluso me había aceptado a mí, la Reina de Hielo, como un escudo, una distracción, una herramienta para proteger a Adán del escrutinio de nuestras familias. Todos esos casos de su «amabilidad», su

io, mi vida cuidadosamente construida con Gael, cada una de nuestras interacciones, había sido una actuación calculada por su

l muro emocional que había construido, todo había sido para nada. No era más que un accesorio

r. Esto no era simplemente un error corporativo. Esto era una aniquilación personal. Mi identidad cuidadosamente const

pensó que me estaba usando para proteger a Adán. Pensó que yo era demasiado fría, demasiado ca

s ante mí como un mapa de mi propia estupidez. Me había usado, sí, pero la emoción cruda y vulnerable que había visto en

olución ahora tan fría y afilada como el bisturí de un cirujano. Mi corazón

nítido y poderoso. Me peiné, un moño severo y elegante. Me miré en e

ión en el salón principal. El aire crepitaba de tensión. Mi hermano, Cri

? Es crucial que asista a esta reunión. Los términos de la fusión aú

os -declaré, mi voz d

i abuelo se e

cree que está por enc

buelo -dije, una leve sonrisa sin humor tocan

silencio. El tipo de silencio

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY