piel extremadamente caliente y no era por tener fiebre, la calentura de su cuerpo era algo fuera de lo que había

re por pasar todo el día en la cama. Captó movimiento y levantó la mirada llevándose un susto de muerte al ver a su futuro espo

un poco aún sentada en su cama. Él n

trata de estar lista antes que llegue a tu alcoba ¿estamos? —ella asintió sin poder pronunciar palabra alguna. El hombre

n y decirle lo mucho que lo amaba. Recordarlo solo hizo que la herida en su pecho creciera, como extrañaba a ese chico que robaba sus pensamientos, suspiros, como deseó

se a Maddox tomando té, lo supo por el

o lo hiciera—no te esperes una ceremonia como boda. Nosotros celebramos de otra manera el comprome

n ella y se dio cuenta de lo que faltaba—mi señor—Ma

ro esposo le diga que hacer—sígueme—eso hizo. Lo siguió por otros pasillos que conectaban con el jardín. Darlene ama

Miró de reojo al alto hombre que caminaba un paso más adelante que ella como

llos que dejaba atrás. Estudiaba con la mirada si era posible escapar de esa fortaleza o si

e ese hombre hizo que la chica lo

sposo dio la vuelta para mirarla detenidamente. No

También su belleza. A pesar de que sus manos demostraban trabajo forzoso por un largo tiempo, esos grandes ojos brillaban. Maddox atribuy

bía estado fantaseando con el momento en donde podría marcarla como suya. Donde bebería d

n con fuerza, la chica soltó un que

ue tu mente no lo olvide—cada vez incrementaba la fuerza en su mano y Darlene sabía que le quedaría un color oscuro en ese lugar—como no te has portado bie

illación que sentía en aquel momento. Odiaba a ese hombre

a de que bajaban a un sót

gar?—su voz temp

n golpe fuerte y un empujón la dejó caer dentro de una de las celdas

chica ignorando el dolor que su cuerpo sufría a cau

me perteneces a mí y hasta que eso no te puede claro, no saldrás de aquí—ignorando las suplicas en