Las pelotas de mi esposa

itorio y él le saludó con un gesto de la mano, le advirtió que tendría un invitado Germán Fisher, le advirtió q

ibirle en el elevador. Los dos hombres estrecharon manos e hicieron una breve evaluación del otro; Germán se dio cuenta de que Adam era un hombre con mucha presencia y carisma: el señor Luthor pensó que era imposible que ese homb

esposo difícil, sus cuatro esposas anteriores se lo

¿es usted un

a na

d un espo

Tengo otra clase de p

te? —los d

miento, bueno oculto información más de lo que debería y no

se de inf

arejas, dinero

e años, abandonaría a su esposo m

no pudo velar apropiadamente porque cuando llegó de su viaje su suegra le había incinerado. También era consiente de lo fuerte y compasivo que fue con su segunda esposa durante la lucha contra el cáncer segunda y que el amor y el apoyo ni el hijo en común su hijo fueron suficientes para retenerla. El señor Luthor intentó una tercera vez encontrar el amor en una mujer que había estado siempre a su l

gunta principal, ¿por q

or y con Jane sentía que lo había encontrado. Su esposa era mucho más joven que él, veinte años para ser exactos y la mayor parte del tiempo sentía que no estaba a la altura de las necesidades de su alegre y aventurera

tado buscando y a la q

ión. —El hombre de ojos azules penetrantes miró al detective a

as de mi esposa, espero disfruten demasiado con Aman, sus seis

no tengan vergüenza de dejar sus