The Boyz in the Band

a que, en esta mañana del 19 de octubre de 2018, a las 09h30, en la sala de audiciones No. 4 del Libery Hall

sto para las audiciones y se posará frente a los cuatro integrantes de The Boyz in the Band, a su manager, Roger, y a una señorita sin nombre que fungirá con el t

l funny accent y esa voz que parecerá haber abandonado d

ruidos de artificio de las cámaras fotográficas incorporadas a los celulares de los

egundos, si contestar el saludo de esa forma debería ser, o no, la respue

nadados a dos tiempos, tanto a Jared como a Marc

x, al igual que sus ojos, cejas y pestañas; la misma piel tallada en alabastr

imilitud estará separada por

n aquella sala había tenido noticia sobre la existenci

a romper el mutismo que seguirá a la estupefacción de los tres miembros restantes de la recién deno

a –responderá Marce

cciones simétricas y mandíbula cincelada por la mano de Dios e

lista de preseleccionados para el casting, antes de mencionar

ciado, hace rato, a explicar a la gente norteamericana que la tilde

Toby Dammer, A.K.A. The Comander, líder indiscutible de

miembro más joven del grupo. O, al menos, el de menor

e sus compañeros, clavará con serenidad

algo bastante infrecuen

ueda como si hubiera nacido con él, inspirará profundo por la nariz y exhalará por la boca, e interpretará Baby, Forget Me Not, un oscuro track del lado

las notas más agudas que Jared puede lograr hasta l

, en gesto histriónico, primero despacio, y luego, tan rápido como si emulara a la llamada de la lluvia de un ritual a

ar, a manos abiertas, que los presentes de

d e ícono incuestionable del grupo, no podría pertenecer a nadie más qu

o e

s por la sorpresa y el brillo de los reflectores. Su pie izquierdo

de las audiciones, caminar hasta el proscenio, subir con parsimonia cada uno de los tres escalones que lo componen, colocarse frente a s

n un gesto mecánico volverá a secarse las palmas de las manos en la tela de sus pantalones

e no

red Cavalier, con toda probabilidad no llegará jamás. Por su parte, la directora de casting opinará que nunca en su vida había visto a tantos hombres hermosos juntos y

supuesto, el novísimo #MarcelCavalier. La oficina de prensa de la banda pretenderá arreglar este último error involuntario, pero esto será imposible; en bu

a generado desde Bohemian Rhapsody, y por el que toda estrella juvenil masculina habrá

a de talentos. Pero, afrontémoslo, Marcel nunca tuvo competenc

uso

n, Rossana Regiés,