l deseo, tatuajes de seducción, cara del diablo tan intu
a helado. Suspiré viendo las gotas caer desde la ventana de mi
cuando salía me lanzaba una mirada de superioridad, ocasionando que m
adecía, me sentía incómoda con él a mi lado. Y no era para menos, me había ll
de los dos teníamos que dirigirnos la palabra. Era más cómodo, estaba pensado pedir
diría un
Minerva y su grupo cotillearán a mis espaldas. Me había levantado tarde porque el día anterior
e huevo. Después me vestí con un pantalón negro rasgado de las rodillas y una ombliguer
urgentemente, aunque sé lo que me dirá, probablemente
e su casa, Ella y Se-Hunt se habían peleado
acíamos quedado, pedí una mesa para d
onar que tenía una vista hermosa, era una de la
minutos que para mí
con la carita que traes no creo que mu
odamente, viendo a las personas pa
tienes ojeras y cuando llegue esta
bueno, no el trabajo en sí, sin
a virginidad? - me miro su
on él en su despacho, de seguro mi rostro en estos momentos est
oja -dijo con los ojos bien abiertos de
vé mis manos a mis mejillas
te conozco perfectamente, alg
.
que tú y él -pregunt
o como se
es que me siga armando historias lujuriosas en mi cabe
dido tanto en su oficina como las cosas que me habí
egunto sorprendida- TN
yo que en algún momento m
la oportunidad de hacerlo inmediatamente los rechazabas y no te importaba un carajo si f
ciendo que para él soy
re lev
estás tan
lo es jimin decir que no soy lo suficiente, me hirió en mi orgu
pena para ti. Y no quiero escuchar que vuelvas a decir que no eres suficiente. ¿Me escuchaste? Er
oportando a Minerva y sus amigas? ¿Sop
arte? Yo te ayudo -aseguro
eng
claro. Por haber her
nteresada, recargue mis manos
hombros, restándole importancia,
En serio? - pre
o dices e
un cero- dibuje con mi mano un en
á, después de todo sigue s
lo dejaré en tus manos - suspiré, vién
lutamente todo lo que te dije -me señaló acusatoriamente-
uraleza, n
hiciste conforme avancé el tiempo - dijo sonriendo, y jugando c
ú lo
®