te
nte disfrutaba de su vida con él. Estaban hablando tumbados en e
ncreíble, con cualidades y defectos, pero juntos lo completa
bueno como el anterior. Algo que no existía
luso durante los viajes de trabajo a veces mandaba a bu
elación. Había un punto más importante, que era el hijo que tendrí
todo lo relacionado con un compromiso. Lo amaba demasiado, más allá de lo que pe
acabaría su relación.
lipe en el armario, secándose el pelo con una toalla blanca y o
o en el corazón - Llegas p
ró la toall
ganas de vert
poco iba aprendiendo algunas palabras en griego, aunqu
mera vez que la había mirado así, con ese deseo. Y
se sentía la más bella de todas, aunque en realidad pens
un fuerte abrazo, pegando su boca a la de ella para un beso largo,
ncanto y sensualidad. Un griego típico con su pelo
e le dejaba hacer lo que quería con ella, n
o torneado y su cuidada dieta y ejercicio lo convertían
y ella dejó escapar un gemido bajo, rendida a su deseo.
cionante es
vestida, ómorfí
o que él quería. Ell
s, pasando la mano por su cuerpo y diciéndole cosas al o
o el anhelo era grande. Podría esperar un poco para eso. Ant
, ya duros por la excitación. No sabía si era una coincidenci
uar con ella durante los preliminares. Tenía muchas dudas que podrían resolverse
s? - le preguntó, subién
o que te he e
- se rió - bes
los brazos por el cuello y de
uelo. Entre besos y caricias, los dos se dirigieron a la amplia
moviéndose apresuradamente, demostrando que realmente la hab
el pelo mientras él rastrillaba su interior, hambriento de placer
e, posesiva, casi áspera, pero a ella le
te modo casi desesperado lo consumía y ella lo seguía. Tenían
lgo incluso espiritual. Cora ya no sabía có