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Historia

Capítulo 4 Su voz mas tranquila

Palabras:1392    |    Actualizado en: 26/09/2022

e problemas en la empresa

voz parecía m

sí problemas? Esta ma

stabas muy contento po

menzaría

o y el proyecto ha sido rechazad

toy cansado de ser un payas

la presidencia, te

e tendrá la presidencia?"

s, voy a pasar a la pre

a, pensé que estaba prep

no lo soy. Leonardo tení

a cuenta más

n lo que estaba escuc

ió a la presidenc

tu padre?" ¿Has pensado en l

emocionánd

ue nunca quisiste ser p

aldita sea Sara, es much

n, estabas todo feliz. Me

ecto de la nueva fábric

iendes nada, así que no j

ulta

l armario y salió vestido con

rápidamente las escaleras,

él, quería entende

edi

, se sirvió un vaso de whisky

igió a la puerta que

bas de llegar, necesita

esito detener el tiem

rgas zancadas

lemos, déja

e a la clavícula colgada en

llevara en ese momen

u

amor, no te bajes así d

ner el tiempo. Se subió encim

puerta del garaje

Sara. Mañana par

ededor de mí y lo vi p

omenzar su Vyrus negr

su moto

arme los oídos, y llorando lo

e habia

vida fnalmente había

ente, con un propósito

idando la compañía de

pisoteando todo y arrasan

i llamado

rnillos, Sara me rogab

e volar y acelerar mucho, as

tenerlo todo, tratando

a y conduje como un loco por

ocidad y ese fue sin

me con furia. Aceleré

lo en los semáforos, me dirigí ha

otor a una velocidad qu

mino. La voz de Cecilia

a por mis venas de tal man

ente a mí. No podía y

d poniendo tras las re

ncontrar una manera d

e la única opción serí

si fuera para proteger

nece

mo espectros en mi vis

ando mis pensamientos,

ra, nada en el mundo era

l tiempo, pero mis pensa

grosero que había sido co

celular vibró en mi bolsil

beza y le respondí con urg

a en

gué, ya no tiene

ecuerdas cuando me lla

ntasma de Cecilia, así que

s ahora, Cec

ra decirte otra vez que

mano van a la carcel, y

a tu pequeña esposa a des

abes tod

do borracho para oculta

esta s

guntarme por qué no acab

umano despreciable. ¿Cómo p

júnior?

a llamar, ¿ente

asil, querida! - d

rozándome arrojé mi celu

fuerza,

as manos en la cabeza

so, esto no estaba pa

o le puse las manos enc

an a punto de estallar de p

a lo que es

a y pensé en lo grosero que

e y entró en la casa por

casa, así que subí

y llamand

lté los escalones d

arme con ella, así que

habitación y entré rápid

ma, no sé por qué la ima

siquiera en su estudio. La casa

y cuando la desesperación

ruptor del comedor, encend

ir encima de la mesa del

e una manera especial, ha

elo. No me acordé de nin

puede estar olvidando, as

despertarse con mi toqu

acercándose a saltar s

i me matas de la pre

aliv

amor, perdóname

unca más, casi me vuelvo

leta, por favor d

tar bien

pregunté, desviando el

e digas que me perdí

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