LYM E
nque no tenía idea de nada. Vio el letrero de sus manos y veía que algo estaba mal, aunque no debería porque estaba el nombre de
a frente a ella. Jhazlym comenzó a saltar al verle, sintió una gran angustia que no sabía como reaccionar, por un momento su rostro pasó a ser tal como lo había visto en las fo
voz, dando brincos c
como se iba acercando a ella. Lágrimas quisieron deslizarse por su mejilla, pero al mismo tiempo no bajaba ninguna, dejo est
, ho-h
uzar esa línea, tan solo se quedaron viendo unos segundos antes de da
res mucho más herm
ó una risita que fue silenciada cuando
, eres m
o que sus manos comenzaron a sudar. Froto dos veces seguidas a los laterales de sus piernas antes de volver a mirarle, notando que la
este extranjero, finalmente logró conocer uno que la volvía completamente loca. Tanto que no se resistió para abrazar su cuerpo y e
hace
se atrevió a soltar el abrazo, sentí
nde, é
tú
tú quieras,
ué? Me
idad, no
o lo
emente
ó su mejilla en el pecho de él, deseando más de esa calidez que le entregaba en ese abr
uiero más de e
tá
a una y otra vez, algunas veces se aprendía los guiones y los repetía junto a los protagonistas. Un poco triste pero lo suficientemente acertado para que la felicidad dure un poco más en el cuerpo de Jhazlym que no está dispue
iste la
rque es
ómo
ue esa canci
, explícame
e, escuch
o que quiere decir la letra, solo sé que me siento feliz cuando la escuchó y que siento que es para mí.» Siguió abrazada a él, y él tampoco la soltaba, la sostenía como si fuesen más que conocidos, como si fuesen más de lo que en ese momento eran. Jhazlym estaba muy feliz, se sentía en ta
cono
e sie
, de verdad,
pro
odía tolerar no saber una fecha exacta, algo concreto porque
rlo ya, no q
ido en el pasado con absolutamente nadie, en ellos solo podía sentir paz y un amor
ención a los detalle
ómo
as a saber en el mom
¿Nos vamos
no de la for
muy com
rá la
za, sintiendo muchas emociones que no podía descifrar, sobre todo la
me co
pero no me atre
s más co
abeza, y Jhazlym
llegar a mí, y
ero sabía que le conocía, que sabía más de él que en ese momento podía confirmar, se sentí
guir trabajan
pueda, pero,
a lo
no es
asta te reíste de
uán
de re
una
o serí
or
e descub
s en su cuello, acercándose tanto como podía a él, lo necesitaba tanto así de cerca que no p
mos i
Quiero es
o debemos
tá
con él. Al menos eso es lo que ella quería creer, ella realmente quería creer que con él todo iba estar bien en su vida. Cuando se volvieron a mirar
e
staban guardados en sus párpados, con lentitud fue abriéndolos como si fuesen cortinas y lo único que pudo ver es el edificio de cuadernos que debía de volver acomodar en su sitio. «¿Esto fue un sueño? No, no puede ser... Carajo.» Se acomodó
le conozco, que ya lo vi, pero no sé. ¿Me puedes ayudar? Quiero encontrarlo para seguir sintiendo esa plenitud,
os iniciar? Nece
ar a algún lado con esta petici