Amores En Torneios

ró

por teléfono mientras conducía por

ondió rápidamente. “Pero puede se

un siglo antes de la medicina moderna? No estaba preocupado. Tenía muchos otros asuntos

a estaba en el maletero de mi coch

ino sinuoso del bosque. No quería ser negativo. Despué

a qu

nsamientos, mi papá preguntó

ho con ellos. Ya sabes cómo es la vida de niñera

ene Candice a

garganta. Echaba de menos a la niña que cuidaba y l

ando me acerqué a mi destino. “Me tengo que

amo

no me atreví a decirle la verdad.

rrupción de la casa junto al lago. Y esa casa estaba justo en frente de mí. Estaba hecho de madera dura marrón, con un centro que parecía un campanario, dividido en cuatro alas, dos a cada lado. El lote se inclinaba sobre el lago, y parecí

e el trabajo, pero ahora tamb

urarme de que me veía presentable y luego crucé el porche hacia la puerta principal. La grava del estacionamiento se pegó a la suela de mi zapato mientras me preparab

puerta principal se abrió. “Tú

botas Timberland marrones, jeans azules y una camiseta blanca cubierta de manchas de pintura. Estaba bronceado, tenía una nariz grande y cabello negro

ho g