Amante prohibido

hora q

hacerlo, sentía a mis hermanas cerca y un en

és de haberme sentido completa, plena y en compañía,

rí mis desnudez y las de ellas también, incluso la de B

o todo con él. El rey había muerto y con sigo se había llevado mi unión con Owen, si es que alguna vez fue directamente con Owen.—¿Do…D

ido,

temente la pregunta porque aquel

mi mano y obligó mi cuerpo a permanecer contra el suelo, si

esión triste por mi ausencia y todas las cosas que seguro le pasaban

a por él!—mi mano se zafó de su agarre y solté un puñetazo en el rostro de Amaris.—Es la realidad.—dijo, lim

amado y yo q

ya no exi

rais! ¡Brais, ven por favor! ¡Brais! Por favor…—él

…lo s

otro mate una vez que ha perdido al suyo? Solo quiero

, Jara. No puedo

í al rey! No está en mí, en ninguna de nosotra

n dice que sería Owen? Podría no ser él, p

en el suelo e intenté aislar el dolor de mi pecho, porque cada

nía que ir por Owen, así sea arrastrándome. Todos guardaron silencio y yo l

no dire

ito! ¡Necesito tenerlo a mi lado! ¡Que sepa que haré todo lo posible por amarlo! ¡Así tenga que c

podía sentir su olor, no sentía absolutamente nada de él, como si cada cosa

velocidad para transformarme, pero un hombr

lla extraña e inusual luna en su frente comenzó a brillar, después su cuerpo se transformó a la misma velocidad que cualquiera de nosotras. Miré hacia el cielo, aquell

pero…quítate de mi camino. Lo único que qui

iencen a organizarse, el manto ha caído y cualquier cria

de que Owen y yo, cuando yo lo e

edo dejar

el lobo retrocedió.

ejarlo escapar. Dejé mi mano en su

me pasar y te acariciaré un poco más tu cabecita.—lo toqué con ambas manos y fui bajando por su cuello, hundiendo mis dedos en su sedoso y brillante pelaje, tan suave y hermoso. Fue bajando las patas poco a poco hasta quedar

ón y apareció el hombre, fue muy rápido y aquellos fuertes brazos me a

er nada, no

—Preguntó muy enojado mientras ca

ada, solo lo tocab

eo y debemos de resguardarnos. Existen cazadores, cazadores con habilidades que ahora mismo son muy peligrosas, poseedores de objetos mágicos capaces de m

¿Desde cuándo se me

a poco, Amaris se acercó a m

oído.—¿Qué diablos es lo que le

es cosa de él. Yo

ro guía, hay que salir de aquí antes de que salga el sol, hay dos vampiros en nuestras líneas y una

en mi dirección, poco a poco fue bajando, sentí el impulso de poner mis manos para que cayera sobre ellas y así lo hi

llevaba algo escrito en letras

Amaris la tomó de mi mano y vio lo mismo que yo. Agitó la hoja frente a mi cara y todas mis hermanas comen

ora qué