Libro y Cuento de Beckett Grey
El voto de la madre olvidada: Recuperando lo que es suyo
Isabelle amó a Kolton con devoción inquebrantable por quince largos años, hasta que el día del parto la sumió en un coma. Él se acercó a su oído y musitó con dulzura venenosa: "No despiertes nunca. Para mí, ya no vales nada". El hombre que creía tierno y dedicado, en realidad solo sentía por ella un hastío infinito y una utilidad infinita. Los gemelos que ella dio a luz con tanto riesgo, junto a su lecho de enferma, llamaron "mamá" con dulzura a su amor platónico. Con el corazón completamente roto, al despertar, lo primero que hizo Isabelle fue divorciarse con determinación. Tras el divorcio, Kolton solo entonces cayó en la cuenta de que su vida estaba plagada de los rastros de Isabelle, y esa mujer se había convertido en su costumbre. Cuando se reencontraron, Isabelle apareció en la conferencia como la experta médica principal, deslumbrante y acaparando todas las miradas. Esa mujer que una vez lo tuvo en su corazón y mirada, ahora ni siquiera le dirigía una mirada. Kolton creía que solo estaba enojada, que con solo que él hablara, Isabelle volvería, pues lo había amado hasta los huesos. Pero en su gala de compromiso, saltó a los brazos de un magnate. Kolton enloqueció de celos, con los ojos enrojecidos, aplastó una copa hasta que la sangre manó...
