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En el tranquilo pueblo de Valle de Rocas, donde el tiempo parece avanzar con suavidad y los días transcurren entre niebla, libros y secretos del pasado, Elena Márquez, una joven bibliotecaria solitaria y apasionada por la literatura, lleva una vida tranquila y ordenada. Nunca ha salido del pueblo, y aunque sueña con el amor, se ha resignado a la idea de que su destino está ligado a la rutina y la calma. Todo cambia con la inesperada llegada de Lucas Herrera, un enigmático arquitecto que regresa al pueblo tras veinte años de ausencia. Lucas huyó de Valle de Rocas tras una tragedia familiar que marcó su juventud, y vuelve decidido a reconstruir su vida, pero también a enfrentar los fantasmas que dejó atrás. Elena y Lucas se conocen por casualidad en el Café Aurora, y lo que comienza como una amistad marcada por largas conversaciones y coincidencias improbables, se convierte en un vínculo profundo que desafiará sus creencias, sus miedos y sus límites
Las campanas de la iglesia de San Elías sonaron con fuerza, marcando las cinco en punto. El otoño ya había vestido de ocres y dorados las calles de Valle de Rocas, un pequeño pueblo escondido entre colinas cubiertas de niebla y leyendas.
El Café Aurora, con su fachada de ladrillo antiguo y ventanas empañadas, era el refugio favorito de los habitantes durante las tardes frías. El olor a pan tostado y canela llenaba el aire, mezclado con el vapor del café recién hecho.
Sentada junto a la ventana, como cada viernes, estaba Elena Márquez, una joven bibliotecaria de 27 años con ojos color avellana y cabello castaño que caía en ondas suaves sobre sus hombros. Su vida, tranquila y predecible, transcurría entre libros antiguos, notas de jazz y las páginas de novelas que le enseñaron más del amor de lo que la realidad le había permitido vivir.
Ese día, sin embargo, algo era distinto.
-¿Puedo sentarme aquí? -preguntó una voz masculina, cálida y serena.
Elena alzó la vista, sorprendida. Frente a ella estaba un hombre alto, de expresión amable y ojos oscuros como el café que sostenía en sus manos. Vestía un abrigo gris y tenía el aire de alguien que venía de lejos, no solo por la manera en que observaba todo con curiosidad, sino por la nostalgia silenciosa que arrastraba consigo.
-Claro -respondió ella, apartando un libro de la mesa-. Está libre.
-Gracias. Hace años que no venía a este lugar... Aunque el olor del café sigue siendo el mismo -comentó con una sonrisa melancólica, como si hablara más consigo mismo que con ella.
Elena sonrió con cortesía, pero algo en su pecho palpitó con fuerza. Aquel desconocido tenía una voz que parecía acariciar las palabras, y sus gestos eran pausados, como si cada movimiento tuviera un significado.
-¿Eres de aquí? -preguntó él, girándose ligeramente hacia ella.
-Siempre lo he sido. ¿Y tú? Dijiste que hace años no venías...
-Soy de Valle de Rocas, pero me fui hace mucho tiempo. Acabo de regresar -dijo, dejando la taza sobre el platillo-. Me llamo Lucas Herrera.
Elena asintió, repitiendo mentalmente el nombre. Lucas. Como los protagonistas de esas novelas que empezaban con un encuentro casual y terminaban trastocando mundos enteros.
-Yo soy Elena.
Y en ese instante, mientras la lluvia comenzaba a golpear suavemente los cristales del café, ninguno de los dos sospechaba que ese encuentro marcaría el inicio de una historia que cambiaría sus vidas para siempre.
Una historia que desafiaría el tiempo, los secretos del pasado, las heridas del presente y los sueños del futuro.
Una historia de amor... bajo el mismo cielo.
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved
Fue engañada vil mente por su prometido y su hermanastra. Por lo que se vio obligada a contraer matrimonio forzado con el prometido de su hermanastra, a quien su hermana había rechazado porque estaba atado de por vida en una silla de ruedas de por vida. -No tuve más remedio que aceptar ser su sustituta porque ella está enamorada y embarazada de mi actual ex prometido y no quiere casarse contigo -dijo ella, mientras que el hombre en silla de ruedas se limitó a mirarla con el rostro desprovisto de cualquier emoción. -Supongo que no tengo opción -dijo el hombre fríamente. Cogió un expediente y se lo deslizó sobre la mesa. Ella sacó el documento y se quedó sin aliento cuando se dio cuenta de que era un contrato.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un día sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavía se mostraba frío con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo quería. Estaba empeñada en ocultarle que tenían una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarían? ¿Caleb se ganaría el corazón de Debra y conocería a su adorable hija? ¡Descúbralo!
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.