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Beso Adictivo

Beso Adictivo

4.7
73 Capítulo
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Contenido

La vida de Joy dio un vuelco. Se encontró atrapada en medio de chismes sobre su supuesto matrimonio con Ted. Aprovechando su situación, él la hizo su esposa, y cuando se casaron, la amó como nunca. Él podría ser indiferente con ella frente a los demás, pero ella en privado era otra historia. Su corazón ya era suyo, solo. Un matrimonio falso los unía, pero el amor de Ted por Joy era real y verdadero

Capítulo 1 Rumores

En el Hotel HT International

John Liang entró en la suite presidencial con un expediente en la mano. Al ver que la puerta de la habitación de su jefe estaba abierta de par en par, entró con cautela. Al entrar, notó que la atención de Ted Ye estaba en otra parte. John Liang tosió suavemente, esperando llamar su atención.

Apagando su cigarrillo en el cenicero, Ted Ye miró hacia arriba. "Bueno, ¿averiguaste a la persona detrás de los rumores?" preguntó.

John Liang le entregó el archivo a Ted Ye y le dijo: "He encontrado el nombre de la mujer que inició los rumores. Creo que ella no tenía mala voluntad. Quizás no necesites demandarla ".

Después de lanzar una mirada fría a John Liang, Ted Ye abrió el archivo y sus ojos de águila escanearon el documento. Absorbió cada detalle que estaba presente en el documento. Una lenta sonrisa se abrió camino hasta su rostro. Volviéndose hacia John Liang, le preguntó: "¿Estás seguro de que tienes a la persona adecuada? ¿O podría haber cometido un error? "

John Liang negó con la cabeza y dijo: "No, no hay lugar a dudas". El interés de Ted Ye parecía haber despertado. John Liang no pudo evitar preguntarse si la conocía.

Después de dejar el archivo a un lado, Ted Ye miró hacia arriba y vio la mirada confusa en el rostro de John Liang. Salió y explicó: "La conozco de la universidad. Por lo que recuerdo, era una chica sencilla e inocente. Incluso en mis sueños más locos, no hubiera imaginado que ella fuera capaz de hacer algo como esto. Bueno, no la dejaré ir tan fácilmente ".

Ted Ye había tomado una decisión. Desde que descubrió al culpable, sus planes habían cambiado. Originalmente había planeado demandar a la persona, pero ahora pensaba lo contrario.

John Liang sabía que Ted Ye tenía un plan vicioso en su mente. 'Es Señor. ¿Tratas con ella porque a él le preocupa su reputación? ¿O es porque siente una animosidad personal hacia ella?

Miró a Ted Ye y le preguntó: "¿Qué vas a hacer con ella? Después de todo, ella es solo una niña ".

Ted Ye le dedicó una sonrisa, tomó un cigarrillo y lo encendió. Después de dar una calada profunda, respondió: "Como dijiste, ella es solo una niña. No la lastimaré físicamente. Pero me aseguraré de que ruegue por mi misericordia ".

John Liang frunció el ceño, preguntándose por qué estaba tan empeñado en molestar a esta chica. '¿Por qué no puede simplemente dejarlo pasar? ¡No vale la pena su tiempo! pensó, pero no tuvo el valor de expresar su opinión.

Después de dar otra calada profunda, Ted Ye miró su reloj y dijo: "Se está haciendo bastante tarde. Puede volver atrás y continuar con su trabajo ".

John Liang asintió y salió de la suite de inmediato. Entonces, Ted Ye volvió a coger el documento. Continuó mirando la foto de la niña. Una sonrisa apareció en su rostro. "Lo siento, pero estás en problemas."

Y luego su risa diabólica resonó en la habitación. Llenó su copa de vino y se la bebió. Ni una vez la sonrisa abandonó su rostro. En todo caso, se hizo más ancho.

En la casa de la familia Xie, Joy Xie buscó frenéticamente un pañuelo de papel.

Pero antes de que pudiera poner sus manos sobre él, un violento estornudo atravesó su cuerpo. Se secó la nariz y se sentó cansada en el sofá.

Su madre salió de la cocina y se acercó a ella. "Joy, ¿no dijiste que tienes novio? Me preguntaba por qué no lo has invitado a casa. Me encantaría verlo ".

Avergonzada, Joy Xie miró a su alrededor, tratando de encontrar una excusa. Tenía muchas ganas de dejar las cosas claras, pero no sabía cómo empezar.

En ese momento, sonó el teléfono, atrayendo la atención de Joy Xie. Agradeció en secreto a la persona que llamaba y descolgó el teléfono. "Hola, Joy Xie hablando", dijo con voz clara.

Desde el otro extremo, una niña se echó a reír. "Joy, asumí que cambiaste tu número de teléfono. ¡Pero vaya, sigue siendo lo mismo! Mañana al mediodía es la fiesta de compromiso de Cindy. Espero que se presente con su esposo ".

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