tenía algo que ver con Dante. Me acerqué a Dante y lentamente le alisé la cara. Dejó de habla

ex es

cómo lo

só la espalda y me estampó un beso en los labios. Sin d

prometida es una di

estaría distraído. Entiendo esa

ntura. Y yo me acerqué automática

una manera. O poner algo de comida en mi boca. Todo era muy sutil, pero extremadamente sensual, al menos para

a del mar a nuestros pies, nos sentamo

ligente. Sí, era mi prom

sobre la mesa m

r y, por lo que par

otro y aún no sabe lo del compromiso. Así que est

esto. ¿Pero no sería más

nta de que había ido un poco más a

ería haber dicho eso. Sabe

ado que eso. En fin, cambiemos de tema,

que había creado con mi comentario. Pero ahora intentaba e

er a algunas de sus preg

gún n

esperaba e

había pedido, nos sirvió y se fue. Mientras tant

engo a

que estudias. Una licenci

aboreó su copa y, cuando terminó, casi

se hizo esc

o iba por ahí gritando que era una escort de lujo. Pero durante el tiempo que llevab

mejores opc

de lágrimas. Al darse cuenta de mi reacción, tomó mi

diota. No debería hab

decir nada, oí una vo

s, Dante. Me s

irada de Dante y me sonrió. Era la misma mujer que

toy. Vivían, ¿qu

ó de arri

lo quería darte las buenas noches. Creía que enviabas a tu herman

ren, mi prometida. Karen,

pción en los ojos de esa

mis amigos de Dante. — Dije con firmez

en sus labios mientras me abrazaba.

rome

puse matrimo

olo de recordarlo se me pone la piel de gal

os ojos, pero lucía una fría sonrisa en

lo mejor a la pareja. Tengo que irme, pero me g

s mañana en el almuerzo. B

. Me saludó y se marchó. Dante me

isculpo por lo de antes.

o va

vamos a

mité a asentir. Volvimos al dormitorio en silencio, pero su contacto con mi espalda fu

me doy una ducha

e no, Karen, sién

iarme de ropa. Sentía que se me revolvía el estómago. Dante se quitó la camisa y lo

nía en las manos. Una diminuta camisola de encaje extremadamente transparente. Deslicé la lencería por mi cuerpo, toda la lencería había