ci

no. Mi hija quería estar siempre en casa, leyendo libros o viendo alguna película de romance, yo solo tengo 38 años, todavía estoy en edad de salir de fiesta y disfrutar de las fiestas. En vez de eso, yo debía quedarme en c

a mañana, todavía el alcohol estaba en mi organismo. Tambaleándome, llegue hasta la cocina para tomarme tres vasos de agua y una pastilla para el dolor de cabeza. Me acorde de la pelea que había tenido con

impaciencia, el sonido me pegaba y el dol

evantaba de mi cama, el reloj

s, señora. —M

a durmiendo. —Le r

tampoco me coje el teléfono, me preocupe y quise venir a ver

ayer tuvimos una discusión y se fue, supu

scusión y se fue, supuse que a tu casa o a la de su mejor amig

a clases y ella no, conmigo no se qu

e haya pasado? —Le preg

a la policía o llamarl

ya estábamos en la

ar una desaparición, mi hija de

mos con la búsqueda de su hija señora

decir que tiene 18 años, es muy inocente no sabe de la

ere que deje todos mis casos a un lado solo porque

Le respondí mientras me sentaba a llorar y a resp

uci

a. Era mi primer amor, el primer novio, mi primer todo. Se me bajo la presión d

í? —Me pregunto

er esta desapareci

o para que empiecen la

y muchas más chicas y niñas desaparecidas. No van a dejar de buscar

o de hombres especiales para que busquen úni

harías algo así

oficina y

sin irse del lugar. Al final del pasillo, estaba una oficina muy elegante, ni parecí

para tener tanto dinero. Tienes el iPhone 14 pro max, tienes un Rolex, el reloj más barato de esa mar

r la mala, no me interesa que tenga que hacer, cuando a uno le falta, nadie va a tu casa a

ar ese tal grupo de hombres para que busquen

tarde y te digo si ya está listo todo. —Me dijo

con el jefe. Últimamente ese muchacho ya no me daba buena espina. Pude escuchar como decía mi nombre detrás de mí, también sus pasos, pero yo seguí caminando y para mi buena suerte, un taxi s