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DE MI VIDA

RA

NAS DE

mi habitación está de un color negro con azul oscuro, mi cama es grande con sábanas de seda oscura como la habitación, tiene una peinadora en azul o

s, y la barra donde suelo desayunar, almorzar y cenar sola, ya me a acostumbrada hacer esta cosas solas, y está la mini-sala está tiene un tono en la paredes entre un m

a aparte, espués de haber desayunado salgo del departamento pongo la llave en la mato, la enciendo y salgo del departamento hacia mi trabajo, hoy es domingo y suelo trabajar medio día de el, ya

el deja de hacer lo que estaba haciendo par

aceta. —lo siento mucho por no aparecer Lalo pero estaba ocupado en mi trabajo.—digo como escusa, el solo asiente y me invita una tasa de café, para la entrada

dejar a Víctor siempre uso unos lentes desde la primera vez que llegue aquí los uso, ya que para mí mala suerte este era mi instituto, como dicen cuando uno no quiere caldo te dan dos plato, Llegue a la gran casa,

o para Liliana pero después Víctor dijo que también era su niñera y bueno que más hacemos. —vamos que se nos hace tarde.—dijo Liliana cuándo vio que ya tenía los boletos en la mano, está niña es muy mandona, y me da gracia porq

r todo, eso es uno de mis primeros pensamientos cuando entré a ganar dinero, la adrenalina que se siente es algo muy extremo ya que siempre ganó. Llegamos al parque de diversiones, está lleno ya que hoy es el día que la gente visita má

A DE L

o.——hoy hay peleas te anoto colombiana.—dijo el es algo absurdo que me pregunte. —si ya sabes cuándo entregan los pedidos para Arturo.—digo ese maldito me

ebes a una persona peligrosa como yo, pero es bruto esa persona para meteré donde no le debe. —hay no es mejor ser tu amigo que enemigo colombiana.—dijo el con gracias yo solo suelto un s

LA LL

el apartado se suelta a una velocidad impresionante, Víctor y Liliana gritan asiendo el dúo con los demás, yo solo disfruto está sensación tan sabrosa, vuelve a subir ya esto esperando a que vuelva a bajar, como si escucharán mis pagarías se suelta de nuevo e

ren ir.—digo los chicos sacan el mapa de los juegos y escogen una de un barco que se muyyyyyyy rápido, yo solo asiento. —entonces que esperamos.—digo ellos comienzan a correr c

lgunas navajas que tengo en las mangas de la camisa, una la pongo en la pretina de la cintura después busco la que están en mis botas y las dej

le di esa persona cayó en el suelo, yo chico dejan de hacer lo que hacen ya que sin

levanta más enojo, comienza a lanzar todo tipo de golpes yo los esquivó todos, me deslizó por debajo de él y agarró sus dos piernas hacie

capaz de atravesar está navaja en tu asquerosa garganta. —dije ya cansada de que no hable, el solo asiente yo pensaba que se iba hacer más difícil, sabe que es lo bueno Para el. —solo sigo órdenes, po

s, llegó la hora de irme, me doy otra ducha me pongo mi ropa interior negra, un crotop negro con chaqueta de cuero de color negro, un pantalón negro también pero este es especial ya que se estira

n Leonel hablando con un señor y a una chica que estaba al lado de

se con una chica que pueda ser su hija. —no te importa señor.—digo con seriedad y frialdad en mi voz el me mira divertido maldito loco. —Huy qué gatita más bella.—dice este maldito, gatita, ja

cia de este señor que me está dañando mi vista con su presencia. —eso tampoco te importa cariño y que tal si no la pasamos bien esta noche gatita.—dijo el muy asqueroso, primero le doy un

porque no pasar una noche con el pero a cambio quiero a la chica. —listo pero no quiero dinero.—digo el me mira de nuevo confundido. —entonces que es lo que quieres.—dijo el, yo sonrió y miro a la chica que ella se da cuenta de mi mirada y la alza, me da pena por ella, no se merece que la traten hasi.

y golpeó, y el cae, se levanta de nuevo, doy una vuelta en el aire y le pegó en la mandíbula, pobre está muy golpeado y yo estoy como nueva, me casé y de este juego, me deslizó por debajo de él y le hag

el megáfono las personas gritan los que apostaron por mi, y los d

maldita sea lo que me faltaba meterme en la cama de uno de ellos. —soy una mujer de palabras vamos a tus casa yo que se.—digo el asie

gusta los lugares tan grande me traen malos recuerdos, a que venimos a esto o a lo otro señor.—digo coqueta,

tó, el me mete un dedo en mi intimidad, maldita sea el mafioso sabe lo que hace, desp

, sus movimientos son cada vez más fuerte estoy por llegar de nuevo a mi liberación, mi cuerpo comienzo a temblar y m

onerte algo garita.—dijo el yo lo miro confundida. —no lo que paso hoy solo, no se repetirá de nuevo.—digo el solo me mira triste, me levanté de ella cama y comienzo a vestirme para marcharme. —afuera la estar esperando

hacia la moto, con la chica de tras mío le quito la cadena es que es un desgraciado como la tiene amarrada, puede que Haga un sexo de infarto pero no tiene perdón, e

la espalda cuando estés sola no puedes dejar entrar a nadie o te castigare en tendido Violetta.—digo, ella asiente no soy muy buena en demostrar cariño solo lo hago con Liliana y Víctor, y eso es por