sible, en cuanto separo mis labios, la chica de cabellos claros envuelve sus dedos alrededor de su brazo empujándola hacía la salida. Un gruñido frustrado sale de mi gargant

la misma chica, habían sobre algo, agudi

el equipo de básquetbol— le dice a mi mate, está asiente y se alejan la u

camentos? ¿Nuestra

a, en su lugar bebé el de durazno. Cuando termina de comer saca un frasco de su mochila al parecer un tipo de fármaco, lo abre son pastillas, toma dos colocándola sobre la palma de sus mano, pasa las píldoras terminando con una pequeña muñeca q

reloj avanzó con prisa, en cuanto los alumnos salieron de sus clases me apresuré a busc

la, se guío a si misma entre un callejón de lo más normal, aunque para mí, imaginarla andar por este sector de la ciudad caída la noche, hacía que mis sentidos se revolviera

ve nuest

a sola persona, las manchas de humedad en las esquinas inferiores de la pared, convierten la estancia en lúgubre, lo primero que noto es un sofá pequeño de dos asien

un lugar mejor, en n

mangas largas tejida. El escote cuadrado enmarca perfectamente su cuello, decorado con un collar de tres capas, su diseño de cerezas pequeñas le hace ver cómo ella, tierno. La habitación es pequeña, está repleta de dibujos pegados en la pared, a lado de un escritorio creativo, puedo notar la colección de apenas cinco libros, por su portada asumo que se

abajo antes de que me pongan r

ver hacia ella noto que su cuerpo se ha paralizado, tenso, el olor a miedo nace de sus poros, su corazón empieza a

a el. No hay marcha atrás, salgo de

ero ella simplemente balbucea súplicas. Corre al otro extremo de la habitación y t

e siglos en venir hacia mí—frunce el ceño y

la policía!— Niego con la cabeza y un

voy a dejarlo ir. Se que es confuso pero—Me acerqué. Andrea retrocedió hast

lma gemela

reaccioné suficientemente rápido, sentí cómo estrelló la copa de la lá

uerta de la entrada, la cerré con la palma de mi mano. Arrinconándola contra

ga favorita— susurré dejando un cast

tina bajo mi toque, la miré a lo

s pareciendo un puto

res que ha

ro y llevémosla a

Y yo era el p

, eres mía tanto

é removía entre mis brazos pero lo único qu

es mía desde ahora Andrea. Estamos d

os de las historias, ¿Qué sigue? ¿Me dirás qué eres un

migo a un asqueroso vampiro. Sonreí de lado, ahora comprendía el buen papel que habían hecho los humanos al

e haz dicho, soy un hombre lobo— frunció

ra de lo más hermoso que

ue ser una broma de Luciana, ¿en dónde está eh?—Se

aquí, no es un

la sabe lo que me gusta leer, sobre todo que dije q

iego?— Sonreí cínicamente. Andr

mate, soy un

con la cabeza, ya no parecía asu

Luciana que caí en su maldito juego, no tengo la menor idea de cuá

su muñeca y la arrastré hasta

obo y yo soy tu mate?,

ayoría de la ropa quedando solamente en box

ro

rmarme, Carter está emocionado por mostrarse con su mate, pero yo solo deseo que nos acepte. Mis huesos crujen, mi peso es deten

lla, ni siqui

más lento y su pulso a regularizarse. Andrea se tambalea un poco, sus oj

n mi forma de hombre colocándome

y una extraña opresión se filtra en mi pecho. La cargo y l

mo mi celular que se encontraba en la bolsa de m

pasando? Aquí es de madru

ntré a nuestra Luna, y además es una humana—Una carcaja

vengarte por pe

de la universidad— suelto con autoridad, el silencio muestra q

eso es fabuloso, ¿y dime qué planeas

sformé en frente de ell

jo un poco el celular de mi

ó. Si es cierto que es una humana, los hijos de la tierra son frágiles.Masa

amilo, me la l

raerla a Gran Breta

ués de estos años me iré sin ella. En cuanto des

dad, no planearas secuestrar a una adole

pir

es una de m

amigos, familia, incluso como lo dijiste está estudia

laridad, Camilo no me e

pero solo a él, que nadie más se entere— cuelgo e

é contigo

an suave, sin evitarlo