OBLIGADA A CASARSE CON EL CEO

s delanteras, vamos que no hay chico que no la conozca que se dé la vuelta para mirarla cuando ella pasa por su lado. Dany es Mmm, como decirlo todo un bombón, mide uno noventa de estatura, no h

mi nombre e

milias con muy buena posición social nos daba igual. Queríamos independizarnos de nuestros padres y

r, mientras nuestros padres estaban sentados detrás de nosotros aunque yo creo que ellos estaban más nerviosos que nosotros. Kim y yo teniamos nuestra

caciones y a la vuelta preparar nuestro bufete con el pequeñ

ues íbamos a ser los tre

y aplaudimos sonrojándose los alumnos, avergonzándose y riéndonos de ellos. Nunca podré olvidar esos minutos maravillosos de es

stros equipajes pues nos marchamos a casa al día siguiente. Pero esa misma noche en el salón de la hermandad teniamos una gran fiestuqui iii y teniamos que ponernos guapis. Kim se puso una minifalda de flores amarillas y un top de media manguita a juego con sandalias con tacón. Yo me puse unos sh

O yo veo doble —lo dije por l

ado la fiesta pre

o los tres se acercaron a nosotros dos compañeros más y amigos nuestros que también estaban para mojar pan tomaca jajaja, bueno ya me entendéis. Era Mark, alto sobre uno noventa de estatura , rubio, color de ojos azul cielo intenso y penetrantes y unos pectorales uahuuuu de infarto, vestido con unos vaqueros azules ajustados que no dejaban nada a la imaginación y un suéter azul ta

apas — no

stamos las dos

e, la Jefa de las chicas pijas. Kim y yo nos fuimos a bailar cuando un chico de la fiesta se acercó a nosotras ofreciéndome un vaso que contenía una bebida quedandose un ratito con nosotras bailando, pero me fui dando cuenta que cuanto más bebía de ese líquido más ganas

que ver, lo veía todo borroso pero bueno. Él rodeó mi cintura con su brazo apretando mi cuerpo hacia su cuerpo, acarició mi mejilla con sus dedos haciéndome sentir un escalofrío de deseo en todo mi cuerpo. Inclinó su cabeza acercando sus labio

, vamos que no hay chico que no la conozca que se dé la vuelta para mirarla cuando ella pasa por su lado. Dany es Mmm, como decirlo todo un bombón, mide uno noventa de estatura, no hay chica que babee por é

milias con muy buena posición social nos daba igual. Queríamos independizarnos de nuestros padres y

r, mientras nuestros padres estaban sentados detrás de nosotros aunque yo creo que ellos estaban más nerviosos que nosotros. Kim y yo teniamos nuestra

caciones y a la vuelta preparar nuestro bufete con el pequeñ

ues íbamos a ser los tre

y aplaudimos sonrojándose los alumnos, avergonzándose y riéndonos de ellos. Nunca podré olvidar esos minutos maravillosos de es

stros equipajes pues nos marchamos a casa al día siguiente. Pero esa misma noche en el salón de la hermandad teniamos una gran fiestuqui iii y teniamos que ponernos guapis. Kim se puso una minifalda de flores amarillas y un top de media manguita a juego con sandalias con tacón. Yo me puse unos sh

O yo veo doble —lo dije por l

ado la fiesta pre

o los tres se acercaron a nosotros dos compañeros más y amigos nuestros que también estaban para mojar pan tomaca jajaja, bueno ya me entendéis. Era Mark, alto sobre uno noventa de estatura , rubio, color de ojos azul cielo intenso y penetrantes y unos pectorales uahuuuu de infarto, vestido con unos vaqueros azules ajustados que no dejaban nada a la imaginación y un suéter azul ta

apas — no

stamos las dos

e, la Jefa de las chicas pijas. Kim y yo nos fuimos a bailar cuando un chico de la fiesta se acercó a nosotras ofreciéndome un vaso que contenía una bebida quedandose un ratito con nosotras bailando, pero me fui dando cuenta que cuanto más bebía de ese líquido más ganas

que ver, lo veía todo borroso pero bueno. Él rodeó mi cintura con su brazo apretando mi cuerpo hacia su cuerpo, acarició mi mejilla con sus dedos haciéndome sentir un escalofrío de deseo en todo mi cuerpo. Inclinó su cabeza acercando sus labio

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